La tendencia a recuperar servicios municipales, a debate en Lleida

La creciente tendencia a recuperar servicios por parte de los ayuntamientos, en especial de abastecimiento de agua de boca y saneamiento, como es el caso de Torrefarrera, Alfés o Bellpuig, entre otros, en Lleida; y también la recogida de residuos urbanos, centró la jornada sobre gestión local y las ventajas de exteriorizarla (contratando a una empresa privada) o interiorizarla (competencia directa municipal) celebrada este jueves en la Facultad de Derecho de la UdL (como explicó SEGRE ayer). Durante toda la mañana nueve expertos en administración local concluyeron que lo que ahora se entiende como remunicipalización de servicios no es algo nuevo ya que desde el siglo pasado la administración local se ha encargado de servicios básicos, entendidos en el siglo XXI como de interés general, ya que deben combinar eficacia con eficiencia. Como ejemplo, el servicio de jardinería, que debe mantener los jardines de una ciudad cuidados y ofrecer una función social bien contratando a personas en paro o con alguna discapacidad. Ahora, la recuperación de prestaciones ha vuelto a la palestra siguiendo criterios ideológicos y políticos, no económicos, ni científicos ni jurídicos, a raíz de la conclusión de muchos contratos que tenían firmas privadas desde hace años. Elegir un tipo u otro de gestión es una cuestión particular de cada administración pública ya que está demostrado que una u otra opción puede ser igual de eficaz, aunque la UE considera que la gestión externa lo es algo más. No obstante, los expertos consideran que cada caso es específico. La UE da un nuevo marco legal al que España deberá acogerse (el Gobierno tramita la ley para hacerlo a finales de año) para evitar corruptelas y garantizar obras y prestaciones de principio a fin (ver entrevista a Juan Antonio Moreno). La evolución de los tiempos está dando lugar a una nueva categoría en la relación entre la administración pública y el sector privado que puede acabar en un modelo mixto de colaboración, aunque será preciso dejar claro qué pasa con las categorías de personal, algo todavía por resolver. Queda claro que para las grandes obras, como los regadíos, lo mejor es la gestión privada, según los expertos.