ENERGÍA RENOVABLES
Alfarràs logra ayudas para reabrir la central de Mitasa en la subasta estatal de renovables
El único proyecto nuevo que se beneficiará de ellas en Lleida desde que el Gobierno las cortó hace 5 años
El ayuntamiento de Alfarràs proyecta volver a poner en marcha la central hidroeléctrica de Mitasa, cerrada desde hace más de una década. Para hacerlo, ha logrado esta semana algo que ningún proyecto de energías limpias en Lleida había conseguido en los últimos cinco años: ayudas del Estado. El municipio, propietario de la antigua téxtil y también del salto de agua de seis metros del complejo, las ha obtenido en la subasta de renovables que el Gobierno celebró el pasado miércoles. El alcalde, Kleber Esteve (PSC), estima que supondrán unos ingresos de decenas de miles de euros al año una vez esta instalación vuelva a entrar en servicio.
La subasta de energías renovables, la segunda celebrada desde el año 2016, otorga al ayuntamiento ayudas por 472 kilovatios de potencia instalada durante un periodo de 25 años. Esteve señaló que se trata de una cantidad fija de 52 euros anuales por kilovatio, mientras que la central venderá la electricidad que genere a precio de mercado. El consistorio no plantea explotarla directamente, puesto que la inversión necesaria para volver a ponerla en marcha se estima en más de un millón de euros. El alclade avanzó que tienen intención de sacar a concurso la explotación del salto de agua en régimen de concesión. “Ya había inversores interesados, y disponer de esta retribución estatal mejora mucho las posibilidades”, apuntó.
La concesión de estas ayudas llega después de que, en 2012, el Estado suspendiese las primas que, hasta entonces, había otorgado como incentivo para favorecer la implantación de energías renovables. Desde entonces, solo los proyectos que ya tenían esta retribución asignada con anterioridad llegaron a ejecutarse. En Lleida, esto paralizó parques eólicos y plantas de biomasa en tramitación.
Ante el parón de las energías renovables y la exigencia de la UE de alcanzar un 20% de la producción eléctrica de fuentes limpias para el año 2020, el Gobierno implantó en 2016 el actual sistema de subastas: cupos de potencia para diferentes tecnologías que se adjudican a las ofertas que pidan retribuciones más bajas. La primera puja se celebró el año pasado y ningún proyecto de Lleida se encontraba entre los adjudicatarios. La del miércoles fue la segunda subasta estatal e incluyó por primera vez una iniciativa de las comarcas leridanas.