El edil de la CUP de Les Borges asegura que no acusa al gobierno de “favoritismo” al contratar
El concejal de la CUP en la oposición en Les Borges Blanques, Josep Ramon Farran, afirmó ayer que no acusa “en ningún caso” al ayuntamiento de “favoritismo” a la hora de contratar personal para trabajos del consistorio o para la Fira de l’Oli. Respondía así al comunicado que emitió el miércoles el gobierno de PDeCAT, que rechaza que el consistorio haya contratado a dedo a hijos de ediles y empleados municipales, exige una rectificación a Farran y amenaza con acciones legales contra él por “calumnias” en caso contrario (ver SEGRE de ayer). El concejal de la CUP se ratificó en la existencia de contratos del ayuntamiento a familiares de concejales y de empleados municipales. “Es algo que puede verificarse en el Butlletí Oficial de la Província”, dijo. Sin embargo, añadió que no se refería a presuntos “favoritismos”, sino que su crítica se dirigía a “la inercia que se arrastra desde hace tiempo” y que supone “llamar a personas próximas para resolver de forma rápida necesidades de trabajo puntual del ayuntamiento”. Farran añadió que defiende contrataciones “transparentes” a través de una bolsa de trabajo.