MUNICIPIOS SALVAMENTO
Camarasa contrata a un vigilante para el verano y licita el chiringuito
Para reducir los riesgos en la zona no habilitada para el baño que se llena de turistas
Imagen de archivo del vigilante contratado el año pasado en Camarasa.
El ayuntamiento de Camarasa prevé cerrar esta semana la contratación de un vigilante para la zona del río, conocida como la Platgeta, entre el Pont Romà y el parque de Maria Rúbies. La alcaldesa, Elisabeth Lizaso, explicó que el consistorio asume el gasto de este vigilante por segundo año (en 2015 lo promovió Interior) con el objetivo de aumentar la seguridad en la zona, que no está habilitada para el baño y que carece de medidas de seguridad, aunque se llena de bañistas, especialmente los fines de semana.
De hecho, el año pasado, en que ya había vigilante, no se registró ninguna muerte por ahogamiento en la zona. El vigilante iniciará sus servicios a partir de Sant Joan y todos los fines de semana del mes de julio, desde media mañana a media tarde. Sin embargo, durante el mes de agosto estará todos los días de la semana, porque la afluencia de bañistas también se dobla. Lizaso recordó que las funciones del vigilante se centrarán en velar por la seguridad de la zona, avisar a emergencias en caso de ser necesario y advertir de la peligrosidad de bañarse en algunas de las zonas del río. No obstante, el vigilante sí tendrá conocimientos de salvamento.
El consistorio también ha sacado a concurso la gestión del chiringuito que hay en esta área del parque Maria Rúbies, aunque ha quedado desierto. Aún así, apuntó esta última semana han recibido peticiones para explotarlo.
Abrir este chiringuito facilitaría aún más la gestión de la zona, que se combinaría con los trabajos del vigilante, señaló. Hay que recordar que al menos nueve personas han perdido la vida en este punto del río Segre a su paso por Camarasa en la última década, la mayoría eran de origen extranjero.
Montgai ofrece una vivienda para atraer socorristas para las piscinas El ayuntamiento de Montgai ofrece una vivienda municipal durante la temporada de piscinas con el objetivo de atraer a socorristas para las piscinas por la falta de oferta por los nuevos requisitos, según explicó el alcalde, Jaume Gilabert. Una medida que el consistorio ya implantó el año pasado después de irse en mitad de la temporada el socorrista. Este municipio es uno de los que hoy se reunirán con el dirección general de deportes para abordar el problema de la contratación de socorristas.
