MEDIO AMBIENTE AGUAS
Algas en las aguas del Segre merman el riego mientras la demanda aumenta por el calor
Disminuyen la capacidad del Canal d’Urgel, donde reducen las dotaciones de los regantes || Obligan a parar bombeos al obstruir los filtros en el Segarra-Garrigues, donde también taponan aspersores
La proliferación de algas en el cauce del Segre se ha convertido en un problema que frena los riegos Canal d’Urgell y del Segarra-Garrigues justo cuando la demanda de agua está en un punto álgido debido al intenso calor. Los regantes constatan que esta vegetación, habitual al inicio de la campaña de regadíos, suele desaparecer arrastrada por el caudal durante el mes de mayo. Este año, sin embargo, persiste más de lo habitual y disminuye la capacidad de conducciones, obstruye filtros de bombeos y tapona aspersores.
Filtros obstruidos por algas han obligado a parar tres veces esta semana (la última ayer mismo) el bombeo del Segarra-Garrigues en Albatàrrec, que abastece de caudales del Segre a esta localidad, así como a Montoliu de Lleida y Sunyer. La operación de limpiarlos impide restablecer el agua durante varias horas. “El caudal que circula a veces viene turbio y se percibe olor a cloaca”, explica Ramon Guiu, agricultor de Montoliu y miembro del sindicato JARC. La empresa concesionaria, ASG, por su parte, reconoció que recibe quejas de los regantes e indicó que actúa ante cada incidencia. Sin embargo, fuentes de la firma apuntaron que el problema es el estado en que llega el agua. Las mismas fuentes señalaron que esta vegetación llega a taponar también aspersores.
Por su parte, el Canal d’Urgell ha comprobado que la presencia de algas, especialmente en el canal principal, merma el caudal y reduce la capacidad portante entre dos y tres metros cúbicos por segundo, cuando la máxima es de 33 metros cúbicos por segundo. Así lo explicó Amadeu Ros, miembro de la junta de gobierno. La comunidad lleva a cabo actuaciones para cortar las algas y despegarlas de las conducciones de agua.
La larga ola de calor y una elevada carga de nutrientes en forma de nitratos en el caudal del río se perfilan como dos de los principales motivos de la proliferación de algas. Algunos regantes reclaman que la CHE aumente el caudal del río para arrancarlas.
Quejas por los mosquitos cerca del río Junto a los problemas que constatan ya las comunidades de regantes que se abastecen del Segre, la presencia de algas ocasiona también protestas por la proliferación de mosquitos en las márgenes del río a su paso por Lleida ciudad. Por su parte, la Generalitat lleva a cabo su campaña anual de fumigaciones durante el verano para frenar la mosca negra en el cauce del río.