SEGURIDAD
Los bomberos de Agramunt, sin pantalones para los fuegos agrícolas
“Voluntarios se los han tenido que comprar en la ferretería por su cuenta”, explica el jefe del parque || No les han devuelto 20 mangueras del fuego de Rocallaura
Los bomberos muestran pantalones que tienen rotos y los que se han tenido que comprar.
Algunos de los bomberos voluntarios del parque de Agramunt han tenido que comprarse pantalones de trabajo para poder salir cuando hay un incendio agrícola o forestal. “Es indignante. No puede ser que compañeros se hayan tenido que comprar pantalones en la ferretería para poder prestar el servicio”, explicó este lunes el jefe de parque, Ramon Escudé, que añadió que llevan meses pidiendo la ropa necesaria para este tipo de actuaciones.
Se trata de pantalones que son diferentes a los del equipo habitual de intervención (traje amarillo), que se utilizan en el resto de actuaciones como accidentes o fuegos de vivienda, y que recientemente han sido renovados.
Escudé afirmó que “hay compañeros que los llevan agujereados. Lo más grave es que la normativa dice que cada bombero tendría que tener dos mudas”. El parque de Agramunt cuenta con 19 bomberos voluntarios aunque apenas llegan a la decena de activos.
El jefe de parque de esta localidad del Urgell dijo que “la falta de medios es muy evidente en parques como el nuestro. El año pasado, en el fuego de Rocaullaura, prestamos 20 mangueras y dos mochilas que todavía no nos han devuelto”.
“Haremos todo lo posible para que el parque de El Pont de Suert no cierre” El director general de Bomberos, Juli Gendrau, afirmó este lunes a este periódico que “trabajaremos hasta el último momento para evitar el cierre del parque de El Pont de Suert porque somos los primeros interesados ”. Interior ha ofrecido la posibilidad de incorporar de 3 a 5 bomberos voluntarios durante la campaña y que funcionarios hagan algunas horas a partir de septiembre, algo que los bomberos de El Pont han rechazado. Gendrau añadió que “queremos encontrar soluciones a corto y a largo plazo porque somos conscientes de la importancia que tiene este parque”. Alcaldes y el presidente del consell de la Alta Ribagorça han hecho llegar al presidente de la Generalitat y al conseller de Interior un escrito anunciando medidas de fuerza en caso de que el parque cierre puertas el próximo viernes.
