De centro de aves a jaula vacía

El ayuntamiento asume que el inmueble nunca acogerá el centro de estudio ornitológico. “Ya hay otro centro para este fin”, señala el alcalde; pero quiere reabrir el edificio para dejar al descubierto las arcadas y “que los vecinos las puedan ver, igual que antes”. En esta tarea lleva invertidos los dos últimos años para conseguir unos 40.000 euros que costaría derribar las paredes y dejar los arcos a la vista. “Agricultura me manda a Territorio y Sostenibilidad y Territorio a Agricultura, que es a quien compete la obra desde el principio, pero no hay manera de solventar esta metedura de pata”, remarca. El objetivo es terminar, cuando se pueda, la inmensa mole de ladrillo que ha quedado en medio del pueblo. “Si conseguimos abrir la primera planta, la segunda la dedicaríamos a las entidades sociales para dar uso a una infraestructura que cada vez se deteriora más”, puntualiza. “Sin embargo, la Generalitat se ha desentendido de todo y los vecinos cada vez están más molestos por esta situación. Al final, tendremos que ser nosotros mismos los que tomemos medidas drásticas”, indica.

El centro de interpretación de aves esteparias de Mas de Melons se suma al que está ubicado en Concabella, en Els Plans de Sió, para el estudio de las áreas de secano en la Segarra.

Recesión de aves de secano pese a la gran protección Pese a todos los esfuerzos para proteger las aves en las zonas de secano con planes específicos, en especial en el área regable del Segarra-Garrigues, un estudio de la entidad ecologista Seo BirdLife sobre aves esteparias en el Estado asegura que la gran mayoría de las especies están en franca recesión. Los estudios se centran en la situación en Catalunya aunque los datos de las áreas de secano son perfectamente extrapolables a Lleida. Según los censos efectuados en varias especies la tendencia es negativa en la mayoría de ellas salvó en el ‘milà negre’, la ‘ganga’ y el ‘colotiu’. La variedad donde la recesión ha sido más crítica ha sido la ‘terrerola vulgar’. Cabe recordar que la ‘alondra dupont’, una especie típica de áreas esteparias, en concreto, del tomillar de Alfés, fue vista de nuevos a primeros del pasado año, diez años después de que la comunidad científica la diera por extinguida por lo que se extremaron medidas para preservarla.