URBANISMO
Exigen más seguridad ante riadas a nuevos edificios y carreteras en terrenos inundables
Un nuevo reglamento estatal empieza ya a condicionar la planificación urbanística de municipios como Agramunt y La Granja d’Escarp || La misma norma facilita regularizar decenas de campings en Lleida
Construir edificios, carreteras y otras infraestructuras en terrenos inundables próximos a ríos exigirá a partir de ahora nuevas medidas de seguridad ante riadas. Así lo establece un decreto estatal, en vigor desde diciembre y que empieza a condicionar ya la planificación urbanística de municipios como Agramunt y La Granja d’Escarp.
Esta misma norma, en cambio, facilita el proceso de regularización en el que están inmersos desde hace dos años la mayoría de los 60 campings de Lleida (ver desglose). El reglamento fija nuevas condiciones para construir en terrenos calificados como zonas de “flujo preferente”: son las que concentran más caudal y donde hay mayor riesgo de daños a personas y bienes en caso de riadas.
En ellas prohíbe actividades como la acampada y condiciona nuevas construcciones a que no reduzcan la capacidad de paso del agua durante una inundación. Esto pretende evitar obstáculos que aumenten la velocidad del caudal e incrementen los daños aguas abajo. Agramunt y La Granja incluyen ya estos requisitos en planes que someterán la próxima semana a la aprobación de Urbanismo.
Agramunt plantea que plantas bajas inundables queden sin fachadas para facilitar el paso del agua
En el caso de Agramunt, donde la rubinada de 2015 provocó la muerte de cuatro personas, el ayuntamiento plantea cambiar las normas sobre nuevos equipamientos en zona de flujo preferente, que se extiende a buena parte del núcleo urbano. Así, exigirá informes de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y a Protección Civil para autorizar obras.
En edificios cuya planta baja esté por debajo de la cota de inundación, esta deberá quedar al descubierto, sin fachadas, para que el agua pase por debajo del inmueble en caso de avenida. El alcalde, Bernat Solé, explicó que pretenden mejorar la seguridad mientras tramitan el nuevo plan de ordenación urbanística (Poum).
En este sentido, apuntó que estas condiciones para equipamientos podrían extenderse también a edificios de viviendas con el futuro Poum. La Granja, por su parte, proyecta un vial para desviar los camiones del centro del pueblo, un camino ubicado también en zona de flujo preferente.
Tras contactos con la CHE sobre las condiciones para obtener su visto bueno, el alcalde, Manel Solé, avanzó que deberán elaborar estudios sobre cómo afectará esta vía al paso del caudal en caso de riada e introducir medidas correctoras donde lo obstaculice. Añadió que esto puede representar costes adicionales.
las claves
- La nueva normativa. El reglamento protege la capacidad de evacuar agua de las zonas de mayor caudal en caso de inundaciones y condiciona obras a que no la reduzcan.
- Fraga replantea proyectos. La capital del Baix Cinca es otra localidad donde el reglamento sobre inundabilidad condiciona la planificación urbanística y obliga a replantear proyectos como la residencia para la tercera edad y la ampliación del colegio Maria Moliner (ver SEGRE del pasado martes).
Planes de emergencias para reducir los riesgos La misma norma que condiciona obras en suelo inundable abre también la puerta a mantener áreas de acampada próximas a ríos fuera de las zonas de flujo preferente, consideradas de mayor riesgo, así como otras actividades ya existentes en suelo inundable si se dotan de planes de autoprotección ante riadas. La Federación de Hostelería lo considera una mejora a la hora de regularizar los campings en Lleida.