El Parque Natural del Alto Pirineo mejora la pista de acceso a la Pica d'Estats

El Parc Natural l’Alt Pirineu ha finalizado a principios de julio las obras de arreglo y mejora de las pistas forestales de Boet y de Aixeus, que dan acceso a los senderos más concurridos de la Vall Ferrera, como los que llegan al refugio de Vallferrera y la Pica d'Estats, según ha informado el departamento de Territori y Sosteniblitat en un comunicado. De esta manera se mejoran las condiciones del tráfico en este punto, que concentra a un elevado número de visitantes durante la temporada de verano, principalmente.

A petición de la Entidad Municipal Descentralizada de Àreu, que pertenece al término municipal de Alins, el Parc Natural l’Alt Pirineu ha impulsado esta actuación, que ha supuesto una inversión de cerca de 43.000 euros. El objetivo es facilitar la movilidad y la seguridad de la circulación en este vial que en el 2016 registró un paso de más de 16.900 vehículos, 5.600 de los cuales durante el mes de agosto.

La actuación abarca en total 16 km, sumando las pistas de Boet y de Aixeus, que enlazan Àreu con el aparcamiento de la Molinassa, y el aparcamiento de Aixeus, respectivamente, puntos de inicio de los senderos más frecuentados de esta área. Por una parte se han mejorado los 12 km de la pista principal de Boet, entre Àreu y el aparcamiento de la Molinassa, donde se inician las rutas a pie hacia la Pica d'Estats, el refugio Vallferrera, el estany de Sotllo y el Pla de Boet, entre otros.

Por otra parte, se ha actuado en 4 km más de la pista de Aixeus, que se inicia en la pista de Boet, a la altura del Pla de la Selva. Así, se ha condicionado hasta el aparcamiento de Aixeus, desde donde se inician las rutas a pie hacia el pico Monteixo, el mirador de la Pica d'Estats y el estany de Aixeus.

Los trabajos han consistido en la nivelación y compactación del firme, el tendido del suelo y la eliminación de las rocas mayores que dificultaban el tráfico. Precisamente, en los tramos más pedregosos se han triturado las rocas y se ha extendido la tierra resultante compactada. También se ha mejorado el sistema de drenaje del vial, con el arreglo de los sumideros y cunetas, y se ha limpiado de vegetación invasora de todo el tramo afectado, para facilitar el cruce de vehículos.

La obra ha permitido renovar este vial, degradado a consecuencia de las condiciones meteorológicas extremas que a menudo sufre esta área, así como del notable volumen de tráfico que soporta.

En el marco de esta actuación, también se ha restaurado un área degradada cerca del Pla de la Selva. Aquí, se ha corregido la pendiente del talud, que era demasiado pronunciado, lo cual hacía difícil el crecimiento de vegetación. Una vez suavizada la inclinación de la pared, se han replantado varias especies vegetales propias, como abedul, pino encarnado y enebros, para favorecer la estabilización del terreno.

Además, en la parte central, bajo la pendiente natural del plano, se ha creado una balsa de 10 metros de diámetro y 50 cm de profundidad gradual, que concentrará el agua canalizada de la lluvia y el deshielo, y servirá de abrevadero para la fauna de la zona, la reproducción de insectos y otros invertebrados y la cría y refugio de anfibios.