SEGRE

CARRETERAS SINIESTRALIDAD

El Govern anuncia el desvío obligatorio de los camiones a la AP-2 de Montblanc a Les Borges

A partir de enero no podrán circular por este tramo de la N-240 a cambio de peajes blandos || El conseller Rull y los alcaldes plantean que entre Les Borges y Soses el uso de la autopista sea voluntario

Reunión del conseller Rull, con alcaldes y representantes políticos de Lleida, ayer en Les Borges.

Reunión del conseller Rull, con alcaldes y representantes políticos de Lleida, ayer en Les Borges.MAGALENA ALTISENT

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El conseller de Territorio, Josep Rull, anunció ayer en Les Borges Blanques ante alcaldes de Les Garrigues, representantes del consell, Diputación y plataforma Prou Morts, que para mejorar la seguridad de la N-240 de manera inmediata y tras hablar con Fomento y la concesionaria Abertis ha propuesto en el plazo de un mes conseguir el consenso territorial para el desviar de manera obligatoria el tráfico pesado de la Nacional hacia la autopista AP-2 entre Montblanc a Les Borges a cambio de descuentos en los peajes y “una derivación voluntaria desde la capital de Les Garrigues hasta Soses”. La reunión se produjo una semana después del último accidente mortal, hace una semana, en que falleció un joven de 20 años de Les Borges. Con él ha habido 28 muertos desde 2009. Rull recordó que en el tramo de la vía de Les Borges a Lleida el Govern apuesta por ampliar la carretera N-240, incorporando un carril por sentido (duplicidad), “es la opción más viable para este tramo de vía que da acceso a los polígonos industriales”, señaló. En este sentido, los vehículos pesados de paso obtendrían bonificaciones del 42,5% en el peaje de la autopista, mientras que para los que hacen desplazamientos locales será del 50%. El conseller reiteró la voluntad del Govern de hacer efectiva la medida a partir del próximo mes de enero de 2018. Asimismo, dio un mes de margen a los representantes políticos y económicos de Lleida para buscar un consenso que avale esta propuesta y trabajar con la concesionaria de la autopista para implementar la medida como solución provisional hasta que comiencen las obras para duplicar el tramo entre Les Borges y Lleida, “cuyo plazo es mucho más largo”, dijo. Asimismo, la directora del Servei Català de Trànsit, Eugenia Doménech, destacó que paralelamente se está estudiando la implantación de un radar de tramo para reducir la siniestralidad. Por otra parte, el conseller de Territorio reiteró la voluntad del Govern de implantar la viñeta anual que deberían pagar todos los vehículos y permitiría el uso ilimitado de toda la red viaria, en la que se incluirían las infraestructuras del Estado. A cambio, desaparecerían todas las barreras de los peajes y se invertiría íntegramente sus beneficios al mantenimiento de estas infraestructuras y en la red de caminos rurales de Catalunya. Una medida que se aplicaría mucho más rápido, dijo, “dependiendo del resultado del próximo 1-O”, concluyó.

Acuerdos en los tramos de vía más conflictivos Existen otros acuerdos del Govern con la concesionaria de las autopistas, Abertis, y el ministerio de Fomento para aliviar el tráfico en las vías más conflictivas y desviar los camiones hacia las autopistas con peajes blandos como en la N-II en Girona o la N-340 en Tarragona (lo que será efectivo a partir de enero de 2018). El gobierno de Aragón tiene un acuerdo para el tramo de la N-II entre Fraga y Alfajarín.

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