Baiasca recupera la carretera tras 2 años de incertidumbre

La nueva carretera al pueblo de Baiasca estará terminada en los próximos días, después de dos años de incertidumbre por aludes que hacían peligrar el único acceso a este núcleo del municipio de Llavorsí. Así lo anunció ayer la Diputación, que indicó que, tras finalizar la pavimentación, solo quedará instalar la barrera de seguridad. Añadió que los trabajos concluirán antes del invierno.

Tras una primera actuación para asegurar el antiguo acceso, el hundimiento de la calzada obligó a construir una variante de más de medio kilómetro sobre el trazado de una pista forestal en una cota superior de la montaña. El ente provincial prestó servicios de asesoramiento técnico y de dirección de obras a petición del ayuntamiento de Llavorsí. Asimismo, ha aportado parte de los casi 200.000 euros que han costado los trabajos junto con ayudas de las consellerias de Gobernación y Agricultura.

Por otra parte, la Diputación confirmó que ha sacado a concurso la tercera fase de la variante de Ivars d’Urgell, que conectará la carretera de Vallverd con la LV-3344. El presupuesto es de casi un millón de euros y el adjudicatario deberá ejecutar las obras en un año.