Efecto desigual en el comercio y casi nulo en otros sectores

El sector del comercio vivió ayer dos realidades diferentes en Lleida y las principales capitales de comarca. En la capital del Segrià el seguimiento de la huelga fue minoritario y solo la cadena de supermercados BonPreu decidió cerrar sus establecimientos. En el Eix Comercial de Lleida la mayoría de comercios abrieron sus puertas y solo cuando pasaban los piquetes bajaron las persianas. No obstante, algún comerciante se quejó que los Mossos no actuaran cuando los piquetes golpearon puertas de establecimientos. Las patronales Fecom y la Pimec señalaron que el seguimiento fue minoritario puesto que abrieron un 90% de los establecimientos, al contrario que en municipios de comarcas donde cerraron hasta un 80% de los comercios. En la Segarra, más del 90% de los comercios y de las industrias cerraron y en el Pla d’Urgell, la pequeña y mediana empresa fue la que más secundó la huelga, ya que cerraron entre un 60 y 70%. A diferencia de otras comarcas, en el Urgell fueron bastantes los comercios de Tàrrega que decidieron no secundar la huelga. Abrieron un 70% de los comercios, la mayoría de los cuales eran grandes superficies y franquicias, mientras que solo un 30% secundaron la huelga. En el Alt Urgell el seguimiento también fue minoritario en comercios e industrias. Precisamente en el sector industrial, según las patronales, la huelga no tuvo efecto, aunque algunas empresas se vieron afectadas por el transporte y los cortes de carreteras. En el sector sanitario, los CAP y hospitales ofrecieron una imagen de normalidad y sin incidencias. De hecho, sindicatos cifraron el seguimiento en un 15%.

Asimismo, la mayoría de bares y restaurantes de Lleida y comarcas no cerraron ayer sus puertas, al contrario que el día 3 de octubre, cuando sí lo hicieron.