La alcaldesa Ada Colau apela a la democracia

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, insistió ayer en que no es independentista y argumentó que la ruptura del pacto de gobierno en el ayuntamiento con el PSC, que votaron el domingo un 54 % de las bases de su formación Barcelona en Comú, “tiene que ver con la democracia”. Colau, que no ha revelado su voto, agradeció la labor de los socialistas durante los pocos meses en que han gobernado juntos y consideró que si el PSOE hubiera consultado a sus bases sobre el apoyo al 155 éstas habrían rechazado apoyar la intervención de la Generalitat y ella no habría tenido que consultar a las suyas. En este sentido, el líder de ERC en el consistorio de Barcelona, Alfred Bosch, ofreció a la alcaldesa acuerdos puntuales para garantizar la estabilidad y la gobernabilidad de la ciudad tras la ruptura con el PSC, pero descartó que los republicanos entren en el ejecutivo de BComú. Por su parte, el exministro socialista, Josep Borrell, aseguró que la decisión de BComú es “puro tacticismo” y con ello Colau se “posiciona para las elecciones”. Y es que precisamente desde las formaciones soberanistas se tildó de “estrategia” la ruptura política.

“No entendemos que a unas semanas del 21-D se haya abierto este debate en estos términos, con una pregunta claramente dirigida y con el añadido de un silencio incomprensible por parte de la señora Colau”, afirmó el presidente del PSC en el ayuntamiento, Jaume Collboni, que tachó la decisión de BComú de un “error histórico”.

El líder del PP en el ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, aseguró que la ruptura del equipo de Colau con el PSC ha dividido a BComú y confió en que, “dentro de poco, los adversarios de Colau en su propio partido sean mayoritarios y pongan fin” a su liderazgo.