INFRAESTRUCTURAS CARRETERAS
La variante de Balaguer ya dibuja su trazado y mantiene abril como fecha de apertura
Dos kilómetros de nueva vía que evitará el paso de 2.000 vehículos diarios por el centro de la capital || Las obras costarán 3,6 millones de euros y Carreteras prevé que los trabajos sigan hasta la primavera
Las obras de la variante de la C-12 a su paso por Balaguer siguen su calendario previsto y el trazado de la nueva ronda ya se vislumbra con mucha claridad. La carretera, que discurre por el noroeste del núcleo urbano de la capital de la Noguera, estará lista a finales del próximo mes de abril, según confirmó ayer el responsable de la dirección general de Carreteras en Lleida, Jordi Benet. La vía tendrá dos kilómetros y se inicia al final de la actual ronda sur de Balaguer, donde actualmente se están llevando a cabo los trabajos para hacer un puente y una rotonda de acceso. Las obras se iniciaron a mediados del pasado mes de septiembre y si la climatología lo permite “en abril la vía estará lista para entrar en servicio”, dijo Benet. Finalizará en la C-12, cerca del cementerio municipal donde también está prevista una rotonda. La variante de Balaguer ha sido durante años muy reivindicada dada su repercusión sobre el tráfico y porque además debe evitar el paso de 2.000 vehículos diarios por el centro de la capital de la Noguera, que desde Lleida se dirigen hacia Àger o al Pallars. También permitirá reducir el trayecto en 9 minutos. En este sentido, la última auditoría del Real Automóvil Club de Catalunya (RACC) en mayo, ‘suspendió’ en seguridad viaria a la travesía urbana de esta carretera a su paso por la capital. El informe de la entidad apuntó que el 80% de la vía no dispone de elementos reductores de velocidad y que el 25% de los vehículos que circulan por el núcleo urbano lo hacen superando la velocidad máxima permitida.
La vía tendrá 10 metros de ancho y el proyecto contempla dos pasos inferiores para garantizar las conexiones a ambos lados de la nueva carretera, que permitirán dar continuidad a los caminos Vinya dels Frares, Creu Trencada y el Barranc dels Rucs. Los trabajos incluyen la mejora de parte de estos caminos y la creación de un nuevo vial de 250 metros paralelo a la variante para dar acceso al matadero municipal y otro de 350 metros, desde la rotonda final para conectar con el cementerio local, que sustituirá el actual acceso directo. El coste de la rotonda asciende a 3,6 millones.