Un muerto y 2 heridos en el enésimo accidente en la polémica N-230

A.G.S., vecino de Barcelona de 73 años, murió ayer tras salirse de la vía en la N-230 a la altura de Viacamp (Ribagorza aragonesa), en sentido Benabarre, en el kilómetro 80,4 de la carretera. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 17.30 horas, cuando el vehículo chocó contra el talud de la carretera y uno de los tres ocupantes del coche perdió la vida. El conductor, vecino de Lleida, resultó herido leve y fue trasladado primero al centro de salud de Benabarre y más tarde lo derivaron al Arnau de Vilanova, mientras que el tercero, F.G.S., de 69 años de edad y también vecino de Lleida, ingresó en el hospital de Barbastro en estado grave.

Horas antes, un accidente con un camión de mercancías peligrosas obligó a cortar esta carretera en Sopeira. El suceso ocurrió poco antes de las 14.00 horas en el kilómetro 107 cuando un camión cisterna se salió de la vía deslizándose por un terraplén de unos 10 metros. El vehículo, que habitualmente transporta metano, iba vacío de carga, aunque como precaución se activó el Plan Especial de Protección Civil de accidentes en los transportes de mercancías peligrosas de Aragón. Hasta el lugar se desplazaron varias dotaciones de bomberos de los parques de Benabarre, Graus, Villanova y El Pont de Suert y ambos sentidos de la circulación quedaron cortados. Media hora después, un carril quedó abierto y permitió que pudiera darse paso alternativo. Los Servicios de Emergencias Médicas trasladaron al conductor al hospital de Tremp con heridas leves.

Cabe recordar que el Conselh Generau de Aran presentó a principios de este mes un estudio para reducir la siniestralidad de la N-230 entre Areny y la boca sur del túnel de Vielha.

Un nuevo siniestro mortal en esta carretera, el quinto en 2017 La N-230 ha registrado en 2017 cinco accidentes mortales. El último tuvo lugar en octubre y murió una mujer de 65 años tras salirse de la vía a la altura de El Pont de Montañana. El Síndic de Aran, Carlos Barrera, explicó ayer que estos sucesos demuestran que es urgente que Fomento, titular de la carretera, reaccione ante su peligrosidad y el presidente de la Alta Ribagorça, Josep Lluis Farrero, aseguró que “seguiremos reivindicando la necesidad de tener una carretera digna”.