Señales de obra en Tres Ponts y los vecinos piden “mínima afectación”

La construcción del nuevo túnel de Tres Ponts entre Organyà y Montant de Tost empieza a tomar forma forma con la señalización del tramo en obras en la C-14 y el desbroce de los terrenos que ocupará el futuro acceso a una de las bocas de este paso subterráneo. Mientras los operarios de las empresas adjudicatarias, Acciona y Copcisa, llevan a cabo estas tareas previas en la carretera actual, la plataforma vecinal que reclama seguridad viaria en este tramo reclama adoptar todas las medidas posibles para reducir al “mínimo” la afectación al tráfico mientras duren los trabajos. Así lo planteará este colectivo en la próxima sesión de la comisión de seguimiento de las obras, prevista para el lunes.

“Pediremos que los responsables tomen las medidas adecuadas para entorpecer el mínimo posible la circulación, ya que serán unas obras muy largas y que esta es la única vía de comunicación que tenemos tanto vecinos como turistas para acceder a Andorra y La Seu, manifestaron. “Esperamos que la vía esté libre durante las horas punta de entrar a trabajar y que las obras se ejecuten sin pausas”, añadieron, para que el túnel entre en servicio en 2020. La comisión creada con motivo de las obras reúne a representantes del departamento de Territorio, de los ayuntamientos de Organyà, Fígols i Alinyà, Coll de Nargó y La Seu d’Urgell, del consell del Alt Urgell, del consejo de alcaldes y de la plataforma vecinal.

La preocupación de los vecinos por la movilidad en este tramo de la C-14 mientras duren las obras tiene su antecedente más inmediato en Lleida en la ampliación de la travesía de la N-260 en Gerri de la Sal (Pallars Sobirà). Los trabajos, que obligaron a dar paso alternativo, complicaron la circulación especialmente en las temporadas de mayor afluencia de turistas.

Cabe recordar que las obras de Tres Ponts durarán 36 meses y la inversión será de 35 millones. El túnel tendrá 1,3 kilómetros y tendrá dos galerías de evacuación hacia la carretera actual, que una vez finalizada la reforma quedará cerrada. Al margen del paso subterráneo, toda la calzada se ampliará hasta los 10 metros de ancho, con dos carriles, uno por sentido.

Avanza el trazado de la nueva variante de Balaguer Entre tanto, las obras para la futura variante de la C-12 en Balaguer avanzan y el trazado de la futura calzada, de diez metros de ancho, por el noroeste del núcleo urbano es cada vez más visible. Esta nueva ronda, de dos kilómetros de longitud, deberá entrar en servicio a partir del próximo mes de abril y, a partir de entonces, reducirá en nueve minutos el trayecto entre Lleida y el Pallars Jussà al evitar el paso por Balaguer, una travesía que “suspendió” en la última auditoría de seguridad del Real Automóvil Club de Catalunya al constatar que buena parte de los 2.000 vehículos que la recorren cada día lo hacen a una velocidad excesiva y la vía carece de elementos para reducirla.