Las pistas, con un metro de nieve para este Fin de Año

El temporal aminoró ayer en el Pirineo aunque siguió nevando en las pistas de Lleida, lo que obligó a cerrar Tavascan de las 9 a las 12 del mediodía. No obstante, las nuevas precipitaciones, que dejaron hasta 30 centímetros de nieve nueva en las estaciones, garantizan espesores óptimos de cara al fin de semana de Año Nuevo, en el que se espera registrar un pleno de ocupación. De hecho, los hoteles próximos a las pistas ya tienen casi todas las plazas llenas. Las reservas van descendiendo de cara al fin de semana de Reyes, aunque el balance también es bueno, según los responsables de las estaciones. Además, se trabaja para que estén abiertos todos los remontes y pistas hasta que finalicen las fiestas navideñas.

En Baqueira, donde ya se rozan los dos metros de nieve en las cotas altas, ya se pudo acceder a La Peülla desde la mañana. En Boí-Taüll también acumulan más de un metro de nieve y todos sus resorts están al 100%, mientras que en las pistas del Pallars Sobirà, Espot y Port Ainé, donde desde el pasado domingo han esquiado más de 6.500 personas (3.300 durante el día de ayer, pese al mal tiempo), también trabajan las máquinas para dejar abiertos todos sus dominios esquiables. Port del Comte, también ha sumado pistas y telesillas a las ya abiertas y está pendiente de una nueva nevada para dejar a punto todos sus equipamientos.

En otro orden de cosas, Rialp, en el Pallars Sobirà, acogió ayer por la tarde (de 17.00 a 21.00 horas) la Fira Aprèski, destinada a ofrecer actividades a las familias después de un día de esquí con talleres, exposiciones de material antiguo, muestra de artículos relacionados con el sector y juegos para los más pequeños.

El certamen estuvo organizado por el ayuntamiento de la población, con la colaboración de las estaciones pallaresas que fueron las que montaron los circuitos y juegos para los más jóvenes.