Linyola, segundo municipio del Pla en tener un parque canino

Linyola será el segundo municipio de la comarca del Pla d’Urgell en disponer de un parque para perros. En concreto, el consistorio ha vallado la zona del campo de fútbol viejo para que los propietarios de mascotas puedan entrar y pasearlos en un entorno seguro. Asimismo, se plantarán cipreses en todo su perímetro y se colocará una fuente y papeleras con un dispensador de bolsas para recoger los excrementos de las mascotas. Al estar vallado, el consistorio también busca evitar que la zona se convierta en un vertedero incontrolado de residuos.

El primer municipio de la comarca en tener un parque para perros fue su capital, Mollerussa, ubicado en unos terrenos en el camí de Belianes, próximo a la ruta verde del Canal d’Urgell. El espacio ha sido un éxito de aceptación por parte de sus usuarios desde su creación, hace ya más de un año. El consistorio propuso ubicar otro parque canino en otra zona de la capital del Pla d’Urgell, aún por concretar.

Mollerussa se hace cargo de los perros que agredieron a un vecino El ayuntamiento de Mollerussa se hará cargo de forma provisional de los dos canes que mordieron la noche del domingo a un vecino en la calle Enric Granados. Lo hará en virtud de la ordenanza de tenencia de mascotas, que estipula que los perros que muerden o agreden a una persona deben estar en vigilancia domiciliaria durante 15 días. Se da el caso de que los propietarios de los animales se encuentran en una casa ocupada, por lo que, según el alcalde, Marc Solsona, “la normativa establece que deben estar en un domicilio, no en una ocupación de un inmueble”. El consistorio estudia llevar a los animales a una perrera y tras 15 días, evaular si devolverlos a sus propietarios.