TEMPORAL NIEVE
Aran provoca 30 aludes controlados y los Rurales asisten a 10 granjas
El centro de aludes del Conselh Generau d’Aran llevó a cabo ayer una treintena de detonaciones para provocar aludes controlados en la zona del puerto de la Bonaigua entre el Sobirà y la Val y garantizar la seguridad en esta carretera. El responsable del organismo, Jordi Gavaldà, explicó que esta es la tercera campaña de avalanchas de este invierno. Aseguró que la probabilidad de que los aludes se hubieran producido de forma natural era baja, porque “la nieve estaba estable y no iba a caer”, aunque sin estas avalanchas controladas se hubieran podido acumular 1,5 metros de nieve con las nevadas que se esperan para los próximos días y hubiese sido “peligroso”. El sistema que se utiliza desde 2004 es el conocido como ‘Daisy Bell’, una máquina que se transporta en helicóptero y que provoca una explosión de hidrógeno y oxígeno que provoca el alud.
Además, desde el lunes, los Agentes Rurales han llevado a cabo una decena de asistencias a ganaderos y masías del Alt Urgell, en los términos municipales de Les Valls d’Aguilar, Fígols i Alinyà y Coll de Nargó, para llevar alimento a ovejas, cabras y caballos. Hasta cuatro de estas explotaciones se desplazaron en helicóperto, según explicaron fuentes próximas al cuerpo. Los agentes también están haciendo un control del estado la fauna salvaje, principalmente del rebeco, porque debido a los espesores de nieve acumulada en el Pirineo tienen una movilidad reducida. Además, han cerrado varios caminos en la zona de Boí por un alto riesgo de avalanchas y comprueban la afectación de la nieve en los bosques. Estas últimas actuaciones las han llevado a cabo en la Noguera, donde la nieve ya empieza a derretirse.
En el Alt Urgell algunos coches con motores diésel no arrancaban debido a las bajas temperaturas
Por otra parte, en el Alt Urgell y la Cerdanya, algunos coches con motores diésel no pudieron arrancar debido a las bajas temperaturas que se llegaron a registrar en estas dos comarcas (ver claves).