Las campanas de Guàrdia de Noguera amenazan con caer

La iglesia de la Mare de Déu del Roser de Guàrdia de Noguera, en Castell de Mur, se encuentra vallada para que ni los coches ni los vecinos se acerquen demasiado al campanario debido a que hay riesgo de que las campanas caigan sobre el asfalto. El alcalde, Josep Maria Mullol, explicó que una de estas campanas (que pesa unos 300 kilos) ya cayó hace años, aunque lo hizo en el interior del campanario y no se registraron daños. Ahora, el deterioro de los bastidores y los soportes de las otras dos, de 500 y 600 kilos, podría provocar que se precipitaran hacia la calle. Ante esta situación, el consistorio ya tiene sobre la mesa un proyecto para solucionar el problema, que comportará una inversión de entre 20.000 y 30.000 euros, y prevén contar con una subvención de la Diputación y otra del obispado de Urgell.

Estas obras consistirán en renovar los bastidores, enganches y soportes y la instalación de un nuevo sistema de mecanización que permita que las campanas puedan volver a girar. De este modo, Guàrdia de Noguera podrá recuperar la tercera campana. El primer edil apuntó que “las campanas son un elemento patrimonial importante”, que tocan los cuartos, las horas, la celebración de las misas y el fallecimiento de los vecinos.