El Canalet quiere desbloquear obras paradas hace un año

Una denuncia de la comisión de seguimiento del canal Segarra-Garrigues obligó a principios de 2017 a parar las obras de modernización de la red de distribución de el Canalet, la comunidad de regantes del Alt Urgell de Tàrrega. La comisión consideró que las trabajos perjudicaban los intereses del Segarra-Garrigues. Desde entonces, el Canalet ha reiniciado los trámites ante el departamento de Territorio para volver a retomar los trabajos de modernización. Esta misma semana han puesto a exposición pública el estudio de impacto ambiental requerido por la Generalitat en los ayuntamientos de Tàrrega y Vilagrassa. El vicepresidente de la comunidad de regantes del Alt Urgell de Tàrrega, Justo Minguella, defendió ayer las polémicas obras de modernización que “son de mejora de la red de distribución y no de transformación de secano a regadío”. Estas declaraciones se hicieron en el marco de la asamblea del Canalet en la que estaban previstas elecciones para presidencia y vicepresidencia pero no se celebraron porque solo hubo la candidatura de los actuales responsables: Guillem Valls y Justo Minguella. Sí hubo incorporación de un nuevo vocal, Pere Ramon.

La modernización de la red de 3.000 hectáreas se inició en 2001 ? El Canalet inició la modernización de su red de distribución en el año 2001 tras la resolución de la CHE de repartir la reserva de caudales del embalse de Rialb, hecho que supuso el fin de la precariedad estacional de la concesión de esta comunidad de regantes. Entonces comenzaron las actuaciones, algunas con la ayuda de la administración, para poder regar durante todo el año, entre las que había la mejora de la red de distribución. Esta modernización abarca unas 3.000 hectáreas de las que más de 2.000 están afectadas por zepas. Durante este tiempo las obras se han llevado a cabo paralelamente con el transcurso de los trámites entre los que hay el estudio de impacto ambiental o el protocolo sobre cómo deben regar las comunidades.