TRÁFICO SINIESTRALIDAD
Muere un vecino de Torà al salirse de la vía la moto que conducía
Enrique Muñoz, de 55 años, viajaba por la carretera de Ivorra || Sexto accidente mortal este año en la provincia, el tercero de un conductor de motocicleta
La localidad de Torà fue escenario la noche del domingo de dos siniestros que acabaron con un balance de una víctima mortal en uno de los accidentes y siete heridos, tres de ellos de gravedad, en el segundo (ver desglose). Según informó el Servei Català de Trànsit, el primero de ellos tuvo lugar cuando faltaban pocos minutos para las ocho de la tarde. Ocurrió a la altura del kilómetro 9,2 de la carretera LV-3003 que une las localidades de Ivorra y Torà. En ese punto, la salida de vía de una motocicleta de gran cilindrada se saldó con el fallecimiento en el acto de su único ocupante. Se trata de Enrique Muñoz, un vecino de Torà de 55 años que trabajaba como transportista internacional, estaba casado y tenía dos hijas. Aunque de momento se desconocen las causas y hay una investigación en marcha para aclararlas, no se descarta que la motocicleta patinara como consecuencia de la humedad de la carretera y el motorista perdiera el control del vehículo. El siniestro obligó activar un amplio dispositivo formado por cinco patrullas de los Mossos d’Esquadra, dos dotaciones de bomberos de Torà y Cervera y dos ambulancias.
Con esta son ya seis las personas que han perdido la vida en lo que llevamos de año en accidentes de tráfico registrados en carreteras de las comarcas leridanas, tres menos que en el mismo periodo de 2017. La mitad de ellos eran motoristas. Además de este de Torà, han fallecido dos conductores de moto más, uno en Artesa de Lleida y otro en Bassella.
Otro siniestro en la localidad se salda con 7 heridos
El segundo siniestro ocurrido en Torà en la noche del domingo tuvo lugar unas tres horas después del mortal. En esta ocasión fue un choque frontal de dos turismos que se saldó con siete heridos, tres de ellos, mujeres, de gravedad. Ocurrió en la curva de la C-1412a a la salida de Torà hacia Calaf, un punto negro del que el alcalde de la población, Magí Coscollola, ha reivindicado en diversas ocasiones su reparación, ya que presenta una ondulación que hace que los vehículos invadan el carril contrario. Según Coscollola, en los últimos años la curva ha visto varios accidentes mortales. En el caso del domingo, siete personas sufrieron heridas y fueron trasladadas al hospital de Manresa. La carretera estuvo cortada hasta la una de la madrugada y se produjeron retenciones.