Hallan un edificio de la época imperial romana en Guissona

Las últimas prospecciones arqueológicas en Guisssona han dejado al descubierto los restos de un edificio de época imperial romana entre los siglos I y II después de Cristo que, según el director del Museu de Guissona, Josep Ros, “es muy posible que sean unas termas privadas o una sede de rituales o un centro para establecer la distribución del agua”. En la misma zona también se ha localizado un segundo edificio de entre 300 y 500 años posterior al primero, bien de época tardo romana o medieval. Se trata de unos terrenos de 1,5 hectáreas en la avenida Verge del Claustre en los antiguos patios de Cal Rafelet, donde la CAG proyecta construir dos bloques de viviendas. Según Ros, los trabajos están todavía en una fase inicial y en función de los hallazgos que surjan se deberá integrar el yacimiento en las nuevas viviendas. Los terrenos se encuentran en la zona de la ciudad declarada como Bien Cultural de Interés Nacional. En las prospecciones trabaja un equipo de la empresa Arqueòlegs.cat y, según explicó su responsable, Òscar Trullàs, el edificio de época posterior se construyó con piedras y losas del primero. Destaca del entorno el entramado de rieras para conducir el agua entre la Font de Guissona y el río Passerell. Se desconoce si las conducciones estaban destinadas al riego o eran simples desagües. Los terrenos presentan también diversos almacenes de grano y un pozo de agua. Según Josep Ros, esta zona se comenzó a excavar en 2005, sin embargo la crisis económica provocó la paralización de los trabajos.