EQUIPAMIENTOS COMARCALES
La residencia de Atades en Fraga acoge a 6 personas con discapacidad
La inauguran tras concluir las obras para rehabilitar las antiguas casas en enero
La asociación Atades, dedicada a mejorar la calidad de vida de personas con discapacidades, hizo oficial ayer la puesta en marcha de la Residencia Comarcal Bajo Cinca en Fraga, en la “antiguas casas de obras públicas”. Abiertas desde el pasado mes de enero, ahora viven seis personas en este equipamiento, con capacidad para 16 residentes. Las plazas ocupadas hasta ahora han sido concertadas por el Instituto Aragonés de Servicios Sociales, IASS.
La residencia fue un proyecto para aprovechar cuatro de las antiguas viviendas de obras públicas o de peones camineros en la salida de Fraga hacia la carretera A-131, que une la capital del Baix Cinca con Huesca. El coste de las obras para rehabilitarlas ha sido de 450.000 euros y disponen de planta baja, jardín y un piso de altura. Tras las obras han quedado como un único inmueble donde los residentes cuentan con habitaciones individuales o dobles, todas con baño, y zonas comunes de comedor, sala de estar, lavandería, zona de lectura y jardín privado.
La residencia es fruto de la colaboración entre el Gobierno de Aragón, el ayuntamiento de Fraga, Atades y otras entidades que han apostado por este proyecto. El objetivo es que los residentes, personas con discapacidad, puedan llevar una vida independiente y autónoma. Tienen plena autonomía, pero cuentan con la atención continuada de monitores y trabajadores sociales. De hecho, para poner en marcha la residencia se ha contratado a cuatro trabajadoras.
El acto inaugural contó con la presencia de la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, y el presidente de Atades Huesca, Lorenzo Torrente, además del alcalde de Fraga, Miguel Luis Lapeña, y de otras autoridades locales, comarcales y provinciales.