Un templo del saber centenario

Junto con la de Les Borges, también abrieron sus puertas las bibliotecas de Valls, Sallent y Olot, una en cada demarcación. Al año siguiente lo hizo la de Canet de Mar y en 1922 las de El Vendrell, Pineda y Figueres. El objetivo que perseguían era la mejora cultural y social de la población y, de esta forma, se llegó a crear el primer sistema bibliotecario español. Todos los edificios presentaban una arquitectura similar de estilo neoclásico ya que se quería que fueran “templos del saber”.

La de la capital de Les Garrigues fue la única que se destruyó. Se ubicó cerca de la actual biblioteca Marqués d’Olivart, en el Parc del Terrall, donde hoy hay una escultura que lo recuerda. Costó 43.141 pesetas de la época y el presupuesto anual de su mantenimiento era de 6.925 pesetas, contando sueldos y otras actuaciones. Además de llegar a acoger cerca de 5.000 libros de escritores tan diversos como Dickens, Molière, Lope de Vega, Àngel Guimerà y Marx, entre otros, además de revistas internacionales, la biblioteca organizó cursos sobre oficios manuales, higiene del hogar, literatura o bellas artes. Por orden, las materias preferidas de los usuarios eran las obras generales, la filosofía, la religión, las ciencias sociales, filología, ciencias puras y aplicadas, juegos y deportes, literatura y geografía e historia.

Su construcción costó 43.141 pesetas de la época y la inaguró Eugeni d’Ors con discursos de Francesc Macià

Aunque, durante los primeros años y, según la ponencia de Macià, “la población hacía poco uso”, la situación cambio y llegó a ser “el caso más espectacular” por lo que respecta a lectores infantiles ya que los niños superaban con creces a los adultos con porcentajes de seis por adulto en 1921, trece en 1922, siete en 1923 y seis en 1924, por ejemplo.

Para celebrar este centenario, la biblioteca de Les Borges, junto con las de Valls, Olot y Sallent han organizado una serie de actos y programado actividades que se llevarán a cabo a lo largo de los meses de octubre y noviembre, según indicó la responsable del centro de Les Garrigues, Mercè Segarra, que culminarán con una recreación histórica el 1 de diciembre.

Obras de la Mancomunitat de Catalunya para la prosperidad del territorio Las bibliotecas construidas entre 1918 y 1922 no fueron las únicas infraestructuras promovidas por la Mancomunitat. Se primó la comunicación y la cultura así que, en Lleida, además de la biblioteca de Les Borges y sus filiales (ver desglose), se construyeron carreteras como la de Les Borges a Cervià y a L’Espluga Calba o la de Mont-rebei con el fin de conectar el territorio. Otra fue la escuela de Els Torms, que este año celebra también su centenario, y que cerró en 2013 por falta de alumnos. Fue en reconocimiento al maestro local Joan Benet por un concurso de redacción escolar.