MEDIO AMBIENTE FAUNA
Alcaldes y ganaderos critican el Piroslife y no le ven beneficios
Ganaderos y ayuntamientos hacen un balance crítico del programa Piroslife, al considerar que el proyecto financiado por la UE para reforzar la presencia del oso en el Pirineo y mejorar su coexistencia con la actividad humana no ha traído beneficios. Así lo expresaron ayer ediles y representantes del sector en Llavorsí, en una jornada sobre el Piroslife en el último año en que la Generalitat recibirá fondos comunitarios para la gestión del oso. Así, el representante de las comarcas de montaña de UP, Ignasi Castellarnau, valoró que el Piroslife, que incluyó la reintroducción del macho esloveno Pyros, “ha sido contraproducente para los ganaderos” y añadió que las medidas de protección al ganado han beneficiado a los rebaños de ovejas pero no a caballos y vacas. El alcalde de Vall de Cardós, Llorenç Sànchez, cree que esta iniciativa “no ha aportado nada al territorio que acoge al oso y a su gente”. “No es ir en contra del oso, sino de la gestión por parte de la administración”, puntualizó. Menos crítica es la alcaldesa de Alt Àneu, Laura Arraut, quien cree que “el problema del oso empezó con las reintroducciones hace dos décadas” y cree que el Piroslife ha servido al menos para paliarlo con infraestructuras como cabañas de pastores y un incipiente turismo del oso.