La Diputación veta que altos cargos reciban regalos y viajes pagados

El pleno de la Diputación aprobó ayer por unanimidad un código de conducta que veta que los altos cargos reciban regalos e invitaciones para viajes pagados. El documento, elaborado por la Xarxa de Governs Transparents, establece que solo podrán aceptarlos por motivos relacionados con el desempeño de sus responsabilidades y que deberán hacerlos públicos. El presidente de la corporación, Joan Reñé, precisó que se aplicará tanto a los cargos electos como al personal en cargos directivos y al frente de los organismos autónomos. Una comisión de todos los grupos políticos velará por el cumplimiento de este código, que va más allá de las exigencias legales y que también han adoptado varios municipios leridanos.

Por otra parte, el pleno acordó destinar 13,4 millones de los más de 21 del superávit de 2017 a liquidar deuda y asignar los 8,5 restantes a inversiones. A este acuerdo le siguió otro, aprobado con la abstención de ERC y Cs, para aplazar transferencias a municipios para actuaciones que “difícilmente se certificarán este año”, según Reñé. Con esto, la Diputación espera acabar el año con una deuda del 34,84% de los ingresos corrientes. “Muy por debajo de lo que nunca ha estado”, subrayó el presidente. Asimismo, se aprobaron los primeros 300.000 euros para estudios sobre cómo implantar la conexión a internet de banda ancha en todos los municipios leridanos, un proyecto que requerirá una inversión de 40 millones en los próximos años.

El pleno asignó los primeros 300.000 euros a estudios para extender la banda ancha a toda la provincia

Por otra parte, el pleno rechazó con los votos en contra de PDeCAT y Unió, UA y Cs una moción de ERC para reclamar paridad en los nombramiento de del consejo general del IEI. Solo PSC y la CUP la apoyaron. En el debate, las portavoces de PP y Cs rechazaron “cuotas” de mujeres, mientras que el gobierno apuntó que la mayoría de candidatos propuestos por municipios y entidades son hombres, algo que condiciona la elección.

Defensa de los payeses a raíz de una moción que pedía inspecciones El pleno rechazó una moción de la CUP que pedía más albergues para temporeros e incrementar las inspecciones para verificar contratos en explotaciones agrarias. PDeCAT y Unió votó en contra, mientras que ERC apoyó tan solo los puntos que aludían al alojamiento y se abstuvo en el resto. Por su parte, PSC, Cs, PP y UA se abstuvieron tras un debate que seconvirtió en una defensa prácticamente unánime de los agricultores.