Un pastor ahuyenta a un oso para evitar un ataque a 2.000 ovejas en Montanui

Un pastor de Montanui, Josep Maria Cortinat, se vio obligado a última hora de la tarde del miércoles a ahuyentar a un oso cuando se disponía a cerrar un rebaño de 2.000 ovejas en un cercado eléctrico para que pasaran la noche en el valle de Castanesa, en la montaña conocida como el Sarronal. “Vi a las ovejas correr despavoridas y no entendía el motivo hasta que me encontré con el oso erguido delante de mi a tan solo cuatro metros”, explicó ayer el propio pastor. “En ese momento solo se me ocurrió gritarle y espantarlo fuera del cercado para que no atacara a las ovejas”, dijo. Finalmente el oso se alejó de la zona y el pastor pudo cerrar al rebaño en el redil. Precisamente, el miércoles también encontraron, en Castanesa, a varias ovejas dispersas y desorientadas que procedían de un cercado también vallado. Al terminar de recoger este rebaño encontraron a una oveja muerta. No obstante, los ganaderos no pudieron afirmar que fuera consecuencia de un ataque del oso visto en Montanui. Las autoridades no pudieron identificar al ejemplar responsable de estos ataques. Asimismo, vecinos de Senet y Bono avistaron ayer a un ejemplar en estos dos pueblos.

Estos hechos se produjeron horas antes de que un centanar de ganaderos del Pallars se manifestaran ayer en Sort contra la fauna salvaje y para reclamar la captura del oso Goiat tras numerosos ataques a ganado. Exigieron también más control sanitario de la fauna salvaje, igual de exhaustivo del que se hace a los rebaños, al considerar que principalmente es la fauna salvaje la que transmite la tuberculosis al ganado y que ha obligado a immobilizar a una decena de granjas del Pirineo. El presidente de Asaja en Lleida, Pere Roqué, apuntó que esta cuestión se puede convertir en un problema de salud pública. En cuanto a Goiat, solicitaron a los políticos comarcales que exijan su captura y repatriación, porque hace apenas una semana mató a una yegua en Son del Pi. Los ganaderos denunciaron retraso en el pago de las indemnizaciones y dijeron que puede conllevar el cierre de explotaciones. Reclamaron la dimisión del director general de Medio Ambiente y del director del Parc Natural de l’Alt Pirineu y dijeron que ganadería y depredadores no pueden convivir. Además, la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, explicó en Seròs que tienen previsto visitar a los ganaderos afectados por los ataques la semana que viene.

El presidente del consell del Sobirà, Carles Isús, aseguró que el territorio “quiere soluciones ya” para los ganaderos y apuntó que convocarán una reunión entre el sector, representantes institucionales y la Generalitat para hablar de los temas que afectan al sector primario del Pirineo. Por su parte, fuentes del Conselh Generau d’Aran aseguraron que antes de capturar a Goiat y devolverlo a su país de origen, Eslovenia, activarán “todas las medidas de disuasión posibles”, entre las que se encuentra el uso de petardos y aplicar productos repelentes a la carroña. Esta fue una de las decisiones que se tomó en la reunión que se celebró la semana pasada en la Val para analizar la situación del oso Goiat. Las mismas fuentes apuntaron que la actitud de este ejemplar es “preocupante” después de los numerosos ataques registrados este año en el Pirineo.