MEMORIA HISTÓRICA
Denuncian pintadas de amarillo en una cruz funeraria en Arbeca
Vecinos de Arbeca han denunciado ante los Mossos d’Esquadra que una cruz funeraria a las afueras del pueblo apareció a mediados del mes pasado pintada de amarillo. Se trata de un monumento erigido en los inicios del franquismo, hacia el año 1940, y una inscripción grabada en la piedra pide “una oración por los que aquí fueron inmolados por Dios y por España”. Sin embargo, no está dedicado a combatientes en la Guerra Civil ni tampoco a personas que se significaran en favor del régimen dictatorial de Francisco Franco.
La base de la cruz, de forma hexagonal, recuerda a seis vecinos que en los primeros días de la guerra, el 13 de agosto de 1936, fueron fusilados por un grupo de milicianos anarquistas en el lugar donde se erige el monumento. Entre ellos había algunos miembros de las familias más pudientes del pueblo y también el entonces alcalde, Marià Mullerat, quien ejerció también como médico y editor de una publicación periódica en catalán, L’Escut. El arzobispado de Tarragona inició un proceso para beatificarlo en 2003.
Los fallecidos tienen familiares que viven actualmente en Arbeca. El ayuntamiento, por su parte, indicó que nunca ha hecho ningún tipo de intervención en este monumento, ubicado en terrenos de propiedad privada al pie de la carretera entre Arbeca y Les Borges Blanques.