VIVIENDAS SOCIALES
La Generalitat compra sesenta pisos en Lleida para ampliar el parque de viviendas sociales
A través del derecho de tanteo y retracto y la mayoría son de entidades bancarias o proceden de embargos y subastas || Aumenta la demanda para disponer de estos pisos y la oferta es cada vez menor
La Agència de l’Habitatge de Catalunya (AHC) ha adquirido en el último año en las comarcas leridanas hasta sesenta viviendas, la mayoría de entidades bancarias y procedentes de embargos o subastas, para ampliar el parque público de viviendas de alquiler social. La adquisición se ha hecho a través del derecho de tanteo y retracto por el que la Generalitat tiene un privilegio de compra por delante de cualquier persona que pretenda adquirir pisos de bancos, provenientes de ejecuciones hipotecarias o daciones en pago a precios módicos. Como medida extraordinaria (con una vigencia de seis años, desde 2016 hasta el 2021) y ante la gran cantidad de pisos de bancos, el Govern se ha dotado de este instrumento que le permite movilizar la cartera de pisos vacíos de los bancos e incrementar el parque público de alquiler social en Catalunya. Desde la Agència de l’Habitatge de Catalunya explicaron ayer que la mayoría de estas viviendas que se adquieren se ubican en poblaciones donde la demanda es más alta “así poder gestionar los casos más urgentes porque la oferta ha disminuido mucho en el último año en la mayoría de los municipios catalanes”, dijeron.
En 2016 la AHC gestionaba más de 14.000 viviendas de la Generalitat destinadas al alquiler social y las comarcas del Pirineo y el llano de Lleida son las que disponen de un mayor número de estos inmuebles por cada 1.000 habitantes, según se desprende del plan territorial sectorial de la vivienda. En concreto el Jussà y la Val d’Aran son las que tienen una mayor proporción de viviendas públicas de alquiler social. En el otro extremo, Les Garrigues, el Solsonès y la Alta Ribagorça son las que tienen menos viviendas públicas de alquiler social. En 2016 la Generalitat disponía un total de 1.102 viviendas en las comarcas de Lleida.
Uno de los municipios en los que se están adquiriendo varios pisos a través del derecho de tanteo y retracto es Mollerussa, tal y como explicó el alcalde, Marc Solsona. De hecho, el ayuntamiento y la AHC firmaron un convenio para atender las necesidades de reubicación de las familias del grupo Sant Isidori entre otras, explicó el primer edil.
Crédito para entidades y ayuntamientos para comprar pisos El Institut Català de Finances y la Agència de l’Habitatge de Catalunya han creado una línea de financiación para la adquisición de viviendas, con un presupuesto de 110 millones, que permitirá a ayuntamientos, entidades sin ánimo de lucro y del tercer sector comprar viviendas de alquiler social. Se prevé que esta línea de crédito permita ampliar la oferta de alquiler social en Catalunya en 1.800 viviendas. La legalidad vigente permite que antes de la venta la AHC pueda ejercer su derecho de tanteo y retracto y adquirirlos para después ofrecerlos a las entidades del tercer sector y a los promotores sociales. Las entidades o ayuntamientos que adquieran estas viviendas de los bancos deberán destinarlas prioritariamente a situaciones derivadas de las mesas de emergencia. Si no hay situaciones de este tipo se podrán destinar al alquiler social para otros colectivos con necesidades de los municipios.