SUCESOS INVESTIGACIÓN
El asesino de Tenerife se formó como militar en la academia de Talarn
Israel Rodríguez Miranda, que mató a su mujer y sus hijas antes de suicidarse, estuvo en el Pallars en 1992 y 1995 para ser sargento || Las niñas tenían 2 y 5 años
Israel Rodríguez Miranda, el militar que la semana pasada asesinó presuntamente a su mujer y a sus dos hijas de dos y cinco años en La Orotava (Tenerife) antes de ahorcarse, se formó en la academia de suboficiales de Talarn. Según explicaron fuentes conocedoras del caso, el hombre, de 45 años y actualmente brigada de Infantería en la base tinerfeña de Los Rodeos, formó parte de la 19 promoción de infantería ligera de la academia del Pallars. Llegó en 1992 para formarse en el primer curso, un año después se trasladó a Toledo para seguir la formación como suboficial del Ejército de Tierra y regresó en 1995 para salir en el mes de julio como sargento. Durante esos años que estuvo en Talarn no le consta ningún tipo de incidente. Años después estuvo destinado como militar en Bosnia, Kosovo y Afganistan, lo que le llevó incluso a ser condecorado por la entonces ministra de Defensa Carme Chacón. Fue esa su última misión internacional antes de quedar destinado en Tenerife, donde permanecía desde 2007.
Y fue allí, en su casa de La Orotava, donde presuntamente cometió el parricidio y el crimen machista antes de suicidarse y matar también al perro de la familia. Aunque en un primer momento se pensó que podría tratarse de un suicidio pactado entre la pareja, el informe preliminar de la Guardia Civil apunta a que la mujer, de 40 años, murió por estrangulamiento y las menores por sofocación después de ser posiblemente envenenadas o sedadas, dos días antes de que fueran encontrados los cuerpo, el pasado 16 de julio. En el domicilio se encontró también nota escrita por el hombre, que al parecer fue el último en morir, pero cuyo contenido no aclara nada respecto a cómo fueron las muertes. Sí apunta a las posibles motivaciones del crimen, como problemas económicos y disputas entre ambas familias.
Los cuerpos de la madre y las dos niñas aparecieron en la misma habitación, las tres sobre la cama de matrimonio, abrazadas y perfectamente vestidas. El cadáver del hombre, que se ahorcó con una polea, estaba en otra dependencia de la vivienda. Los agentes no encontraron señales de desorden ni de que hubiera habido una discusión.