RIEGOS FAUNA
El Govern gestionará este año 3.400 hectáreas de cultivos para preservar aves en ocho zepas
Agricultura lo hace con 2.865 ha del Segarra-Garrigues y quedan pendientes de comprar o alquilar otras 535 || Aplica medidas correctoras y de compensación por la implantación del canal de regadío
Ocho años ha invertido la Generalitat en comprar o alquilar las 3.400 hectáreas de las zepas de Mas de Melons-Alfés, los secanos del Segrià y Utxesa, Belmunt-Almenara, Belianes-Preixana, Els Plans de Sió, Anglesola-Vilagrassa, Granyena y los Valls del Sió-Llobregós para la protección de una decena de aves esteparias (la trenca, terrera común y vulgar, alondra, ganga, xurra, sisón, arpilla, carraca europea y águila perdicera) de cara a paliar los efectos de las obras del Segarra-Garrigues, tal como exige la UE para evitar multas millonarias. Desde 2010 el Govern está inmerso en esta actuación para adoptar medidas correctoras y compensatorias en estas áreas determinadas por los planes de uso y gestión, tal como estipula la declaración de impacto ambiental, que prevé la compra 1.350 y el alquiler de otras 2.050 hectáreas. Hasta el momento, ya gestiona 2.865 hectáreas y durante este año alquilará o comprará las 535 restantes, según explicó el director general de Desarrollo Rural, Oriol Ansón. En estos puntos estaba prevista la construcción de balsas de regulación de agua mediante islas flotantes y abrevaderos, construcciones para la nidificación, sorretamiento o reforma de las líneas eléctricas con el fin de preservar los hábitats de secano.
Precisamente, el pasado martes el Consell Executiu dio luz verde a una redistribución de hectáreas para la sustitución de balsas de regulación mediante islas flotantes que no han tenido el efectos esperado en las áreas de refugio y nidificación de los pájaros acuáticos en el río Set y en el entorno del pantano de L’Albagés. Según Ansón, estas islas flotantes no han funcionado como medidas correctoras por lo que se pasará a eliminar una para la readaptación de la zona. Así, se pasará a la recuperación de hábitat de ribera y la creación de zonas húmedas para favorecer la creación de refugios y puntos de nidificación, Estas medidas ya han sido comunicadas a la Comisión Europea. Según Ansón, la conselleria de Agricultura vela por que todas las medidas compensatorias y correctoras tengan el efecto deseado en la fauna.
soses
La Comunitat de Regants de la Sèquia Remolins de Soses, Alcarràs, Torres de Segre y Aitona estrenó el pasado mes la modernización del riego con goteo y aspersión en un centenar de hectáreas propiedad de unos 200 agricultores de Alcarràs, Torres y Soses. La entidad ha finalizado la primera fase para eliminar el riego a manta y potenciar el ahorro de agua. El proyecto global prevé regar a presión toda la superficie de este regadío del Baix Segre con 753,20 hectáreas próximas al río y de cerca de 450 propietarios. Según el presidente de la entidad, Albert Palau, la inversión es de 5 millones de euros de los que cerca de un 40% será financiado con ayudas de la Generalitat y de la UE y el resto irá a cargo de los payeses que ya han contratado un crédito bancario a 25 años para sufragar los costes. Esta primera fase para modernizar el riego en 350 hectáreas ha contemplado la construcción de una balsa de almacenaje para 45.000 metros cúbicos en Alcarràs, aunque la captación se encuentra en la presa de Butsènit. También se han soterrado más de 3 kilómetros de la conducción principal, que tiene un total de 7. Las obras de la segunda fase se harán este año para modernizar las otras 400 hectáreas restantes en cuando acabe la campaña de regadío, indicó Palau. Los regantes abordaron el proyecto hace más de 2 años para obtener los permisos de la Generalitat. Soses aglutina más de la mitad de las hectáreas y el resto se distribuyen casi proporcionalmente entre los otros tres municipios. La Sèquia de Remolins es una de las pioneras en la modernización del riego en el Segrià. Esta actuación ya se ha llevado a cabo en zonas de Pinyana (Alcarràs), el Canal d’Urgell o el Aragón y Catalunya. Cabe recordar que L’Horta de Lleida también prevé hacerlo en más de 1.000 hectáreas.