SUCESOS EMERGENCIAS
Muere un vecino de Cervera al caer desde un mirador en el Ripollès
El fallecido, de 66 años, se precipitó por un barranco de 30 metros en Vilallonga de Ter || Se encontraba junto con su mujer y otra pareja cuando se produjo el fatal accidente
Un vecino de Cervera de 66 años falleció ayer al mediodía después de precipitarse al vacío desde un mirador de La Roca, un núcleo urbano que pertenece al municipio de Vilallonga de Ter, en la comarca del Ripollès (Girona). El fatal accidente se produjo minutos después de las 11.30 horas cuando el hombre, que iba junto a su mujer y otra pareja, se encontraba en un mirador de este pequeño pueblo de Girona, según informaron los Mossos d’Esquadra y los Bomberos de la Generalitat. Al parecer, el hombre cayó de unos 30 metros de altura tras acercarse al precipicio, que no tenía barandilla ni otras medidas de seguridad, según informaron desde la policía catalana. Al cierre de esta edición, se desconocía la identidad de la víctima.
Un grupo de ciclistas que pasaba por allí intentó socorrerle. Al lugar también acudieron sanitarios del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM) que intentaron reanimarle sin éxito. El vecino de Cervera sufrió un fuerte traumatismo craneal que le causó la muerte en el mismo lugar del accidente. Los Bomberos, que a las 11.43 horas recibieron el aviso de la emergencia, acudieron con una dotación terrestre de Ripoll y un helicóptero con efectivos del Grupo de Actuaciones Especiales (GRAE) y se encargaron de recuperar el cuerpo sin vida del fallecido después de que lo autorizara la autoridad judicial. Los Mossos d’Esquadra intervinieron con dos patrullas.
Sufrió un fuerte traumatismo craneal y unos ciclistas y el SEM intentaron reanimarle sin éxito
La semana pasada falleció un excursionista de Sabadell de 54 años en La Vall de Cardós. Los Bomberos de la Generalitat hallaron el jueves al mediodía el cuerpo sin vida del excursionista, que desapareció el martes a primera hora de la tarde cuando hacía una ruta por Coll de Jou, en La Vall de Cardós (Pallars Sobirà).
Fue hallado en las proximidades de la Borda de Gori, cerca del sendero GR11, la ruta de unos 800 kilómetros que cruza los Pirineos. Los Bomberos de la Generalitat han activado este año (hasta 31 de julio) un total de 35 dispositivos de búsqueda de personas que se habían perdido en las comarcas de Lleida. Todos ellos finalizaron satisfactoriamente. Val d’Aran, con nueve, y Alta Ribagorça, con ocho, han sido las comarcas con más casos. Los Bomberos han practicado unos 150 rescates este año en la provincia.