FAUNA CAZA
Unos 2.500 cazadores inauguran la media veda con las nuevas medidas de seguridad
Obligación de descargar el arma y dejarla en el suelo cuando se aproximen los Agentes Rurales || Los aficionados acatan la normativa, aunque aseguran que ya lo llevaban haciendo desde hace tiempo
Unos 2.500 cazadores abrieron ayer la media veda en Lleida, el periodo hábil para la caza de diferentes aves como codornices, tórtolas o palomas, entre otras, además de zorros, que se alargará hasta el Onze de Setembre, según explicó el presidente de la Federación de Caza de Lleida, Jaume Teixidó, quien aseguró que la primera jornada transcurrió sin incidentes remarcables. La media veda incluye todos los jueves, sábados, domingos y festivos (además de las festividades locales de cada municipio), por lo que tendrá un total de trece días hábiles (ver SEGRE del martes). Teixidó apuntó que la media veda para un cazador “es como un niño que espera que lleguen las vacaciones”, porque “salimos todos, vamos con los compañeros” y “es una cosa que se espera mucho” entre los aficionados a esta actividad.
La principal novedad es la normativa, en vigor desde el mes de abril, que obliga a los cazadores a descargar el arma cuando se le aproximen otras personas como, por ejemplo, Agentes Rurales, y dejarla en el suelo o en el lugar que se indique, además de apartarse un mínimo de cinco metros cuando así lo requieran los agentes de la autoridad. También tendrán que descargar el arma cuando la cacería haya finalizado. Esta es la primera temporada en la que se aplican estas medidas tras el homicidio de dos Agentes Rurales en Aspa en enero de 2017.
Los cazadores aceptan la medida aunque la consideran “un poco drástica”, sobre todo en el hecho de que los Rurales vayan proveídos de un arma si no se trata de actuaciones ante furtivos, según Teixidó que añadió que “por culpa de un señor loco lo hemos pagado todos los demás”. Aunque el periodo de media veda se considera como el inicio de la temporada de caza, hay que tener en cuenta que hay cotos que tienen autorizaciones especiales para cazar todo el año conejos y jabalíes ante la superpoblación de estas especies. Esta situación se da principalmente en el Segrià donde está permitida la captura de estas especies para minimizar los daños que ocasionan en la agricultura y tras las continuas quejas de los perjuicios por parte de los payeses de esta zona.
Tres personas denunciadas el primer día por no cumplir la norma Los Agentes Rurales denunciaron en la primera jornada de la temporada a tres personas por llevar las escopetas de caza cargadas en un camino rural público en el municipio de Cubells, en la Noguera. Por esta razón recordaron que en las zonas de seguridad hay que llevar las armas descargadas y que no se puede disparar en un camino a menos de 25 metros de distancia del sendero. Otros consejos de seguridad que da Agricultura son que el cazador solo dispare cuando tenga contacto visual, se haya identificado la pieza con total claridad y no haya posibilidad de confusión. No apuntar con el arma a personas, cosas u objetos que no sean la pieza de caza y la obligatoriedad de llevar la documentación reglamentaria para desarrollar la actividad, incluida la de los perros que participan en ella. También se insta a respetar las zonas de seguridad, especialmente las fijadas cerca de masías o núcleos de población.