El restaurante de Balaguer denuncia a mossos las amenazas
Cambia el nombre del plato referente a las manos de los fiscales y jueces del Constitucional
Un coche de los Mossos d’Esquadra, ayer al mediodía ante el restaurante de Balaguer.
El propietario del restaurante La Nova Font Blanca de Balaguer, Toni Punyet, denunció el miércoles por la noche ante los Mossos las decenas de amenazas que recibe desde el martes, tras la polémica generada en las redes sociales y medios de comunicación por los nombres de los platos “manos de fiscales y jueces del Constitucional a baja temperatura” y “Guardia Civil andaluz a la brasa”. Pese a descartarlo el miércoles, finalmente Punyet pidió disculpas a través de un comunicado por el nombre del plato que generó más controversia, referente a miembros del Constitucional ‘rebautizó’ como “mans de ‘porcs censurats per l’article 155’ fets a baixa temperatura i acabats a la brasa de carbó”. A pesar del protagonismo que el restaurante concentró en las últimas 48 horas y que en un principio podía parecer negativo, el local atendió ayer al mediodía a 170 comensales y eso sin disponer de la reserva telefónica ya que se vieron obligados a desconectar la línea ante las múltiples amenazas recibidas. Asimismo, el propietario se mantiene firme a los ideales que le han acompañado a lo largo de dieciocho años en el mundo de la restauración, pese a las posibles denuncias de diferentes partidos y asociaciones de jueces y fiscales, que Punyet puede recibir, tal y como él y su abogado intuyen.
