Muere el bombero de La Seu que se cayó escalando en Asturias

Marc Sabata, un bombero de 43 años del parque de La Seu d’Urgell, falleció el jueves por la noche en el hospital de Oviedo (Asturias) donde estaba ingresado desde el pasado lunes tras accidentarse cuando escalaba en el Naranjo de Bulnes (ver SEGRE del miércoles). Así lo confirmaron ayer los Bomberos de la Generalitat a través de las redes sociales, donde informaron de que Sabata, que era originario y vecino de Cal Rosal, en Berga, no había podido superar las graves heridas sufridas en el accidente. El suceso se produjo el pasado lunes cuando este bombero del Grupo de Actuaciones Especiales (Grae) de la capital del Alt Urgell, un experimentado escalador, se encontraba haciendo la vía Murciana del Naranjo de Bulnes, conocido como Picu Urriellu en asturiano, zona en la que se encontraba de vacaciones. Por causas que se desconocen, sobre las once de la mañana Sabata se precipitó desde una altura de 15 metros en la base de la cara oeste de la vía y sufrió un fuerte golpe en la cabeza. Fue el guardia del refugio de Urriellu el que dio el aviso al escuchar a una persona pidiendo auxilio. La zona de difícil acceso en la que se produjo el accidente complicó las tareas de rescate y los equipos de emergencia tuvieron que instalar un pasamanos y una línea de seguridad para descender durante 50 metros. Finalmente lograron cargarlo en el helicóptero y evacuarlo al Hospital Central de Asturias, donde ingresó con un traumatismo craneoencefálico severo. Marc Sabata no pudo superar la gravedad de las heridas y falleció el jueves.

Sabata trabajaba en el Grae del parque de bomberos de La Seu desde 2011. El jefe del equipo, Franc Garcia, lamentó ayer el accidente y aseguró que todo el equipo estaba “consternado”. “Era una persona muy apreciada, un gran compañero y experimentado” de la escalada, por lo que nadie entiende cómo pudo ocurrir el fatal accidente. Las redes sociales se llenaron de muestras de afecto.