Reñé acusa de “deslealtad” a diputados del PDeCAT por pedir su dimisión

Joan Reñé presentó ayer su dimisión como presidente de la Diputación y aseguró que una de las causas de su renuncia es la “deslealtad” de la mayoría de su equipo (PDeCAT), que le pidió su renuncia tras ser detenido la semana pasada. Reñé insistió en su inocencia y aseguró que por el momento seguirá como presidente del partido en Lleida.

Joan Reñé presentó ayer a mediodía la renuncia a la presidencia de la Diputación, que se oficializará en un pleno que se convocará en un máximo de diez días. Hasta entonces, a efectos prácticos seguirá al frente de la corporación. Reñé aseguró que una de las principales causas de su dimisión es la “deslealtad” de la mayoría de los diputados de su equipo de gobierno (PDeCAT). En este sentido, afirmó que el lunes se celebró una reunión en la que pidió a sus compañeros del PDeCAT que le dieran su opinión sobre las medidas que se deberían tomar tras su detención el 2 de octubre en el marco de la operación ‘Boreas’ (que investiga un presunto caso de corrupción, alteración de contratos públicos y blanqueo de dinero). En el encuentro, “la mayoría manifestó que creía que tenía que dejar la presidencia”. Reñé les pidió que le dejaran seguir en el cargo “por la presunción de inocencia” y porque “no estoy imputado”. Asimismo, les reclamó “la misma confianza que tuve con ellos durante años y que ha hecho posible que pudiesen incorporarse a la Diputación a través mío y con sus méritos”. “Me ha dolido no poder tener esta confianza y lo considero una clara deslealtad a mi persona”, dijo.

En este sentido, explicó que “es atípico que alguien que no está imputado presente una renuncia a su cargo”. Además, defendió la “transparencia” de su patrimonio y afirmó que “no he cobrado nunca comisiones” y señaló que su declaración de bienes y su nómina “son públicas” y que no cobra desplazamientos ni dietas, ni tiene empresas y que “lo único que ostentamos en nuestra familia es un patrimonio de generaciones pasadas”. Reñé reiteró que su renuncia es para “preservar la honorabilidad de la Diputación” e insistió en su inocencia. En relación a algunos aspectos del sumario del caso por el que se le investiga a él y a otras 23 personas, negó la existencia de pagos a empresas por obras que no se han ejecutado (ver página 4). No obstante, anunció que de momento seguirá ostentando la presidencia del PDeCAT en Lleida y conservará el acta de diputado en la corporación. También se refirió a la moción de censura que anunció ERC, que calificó como una de las “advertencias o amenazas” que ha recibido estas semanas, aunque “en ningún caso” han motivado su dimisión.