MEDIO AMBIENTE GESTIÓN DE RESIDUOS
El Sobirà, segunda comarca catalana que más recicla después de Osona
Con un porcentaje del 46,47%, un punto menos respecto a 2016, con un 48,16% || Además, Pallars, Alt Urgell, Segarra y Pla d’Urgell, superan la media catalana
El Pallars Sobirà es la segunda comarca catalana que más separa los residuos municipales para reciclaje con un 46,47% después de Osona (52,36%), aunque en 2017 disminuyó ligeramente el porcentaje respecto al año anterior, que fue del 48,16%. En 2015 la comarca encabezó la recogida selectiva en las comarcas de Lleida con un 44,85%. En el lado opuesto, la Cerdanya solo separa un 22,3%. Así lo indican los datos de la Agència Catalana de Residus referidos a 2017, entre los que destacan que hay cuatro comarcas de Lleida que superan la media de Catalunya de recogida selectiva neta, que se sitúa en el 32%. Son el Sobirà, el Alt Urgell, la Segarra y el Pla d’Urgell. El director de la Agència, Josep Maria Tost, defendió que incrementar la recogida selectiva de la basura orgánica es clave porque “de lo contrario es imposible alcanzar los objetivos de la UE”. En 2017 se generaron en Lleida 198.603 toneladas de residuos municipales con un incremento de un 2,19% respecto a 2016, lo que equivale a 1,26 kilos por habitante y día, por debajo de la media de Catalunya que es de 1,40 kilos por habitante y día. Del informe de la ACR se desprende que la Val d’Aran es la zona que generó más residuos, con una ratio de 2,68 kilos por habitante y día. En cambio, la comarca que generó menos basura fue les Garrigues, con 1,09 kilos por habitante y día. Tost destacó que los municipios con influencia del turismo se resienten en la gestión de las basuras. Recordó que es importante la recogida selectiva de grandes productores, porque “más del 50% de los envases de vidrio provienen de hoteles, bares y restaurantes”, así como mejorar la recogida en las capitales de comarca y en los municipios de más de 50.000 habitantes, “donde hay miles de toneladas de residuos”.
La recogida selectiva en Catalunya ha aumentado un 7% en el último año. En 2017 se recogieron unas 100.000 toneladas más que en 2016 (ver desglose).