Tuixent-La Vansa y Lles de Cerdanya abren hoy las estaciones de nórdico

Las estaciones de Tuixent-la Vansa en el Alt Urgell y la Lles de Cerdanya estrenan hoy la temporada más primeriza de la historia del sector del nórdico del Pirineo catalán. La de Lles de Cerdanya abre todas sus instalaciones para la práctica del esquí nórdico y de raquetas de nieve. En cambio, la de Tuixent-La Vansa abre hoy para las raquetas y alquiler de material y no será hasta el sábado cuando ya tendrá trazados los circuitos de esquí nórdico. Albert Nadal, director de la estación de Tuixent, aseguraba que “nunca hubiéramos imaginado estrenar la temporada a 31 de octubre, casi un mes antes de lo habitual cuando como muy pronto habíamos conseguido abrir el 23 de noviembre desde su estreno a finales de los años 70”. “El tipo de nieve es muy húmeda, pero estamos trabajando en compactarla para que aguante lo máximo posible y sea una buena base para la práctica del esquí de fondo”, añadió. La estación del Alt Urgell acumulaba ayer espesores de más de 50 centímetros de nieve, una situación que le facilita la arrancada de la temporada al inicio el otoño. Las tempestas que los dos últimos días han barrido el Pirineo catalán han traído importantes nevadas, por lo que algunas estaciones de montaña han iniciado la preparación de la temporada y la fabricación de nieve para aprovechar el puente del día 1 de noviembre, como han hecho las dos estaciones leridanas y la de Masella, que solo tendrá una pista operativa. Por su parte, las estaciones de alpino mantienen la apertura de los complejos para el 30 de noviembre y el 1 de diciembre. Desde el pasado martes al mediodía la lluvia dejó registros de hasta 54,4 litros en Espot; 48,4 en Boí; de 42,3 en Os de Balaguer y de 44,4 en el Montsec d’Ares o de 20 litros en Albesa. Se prevén nuevas nevadas en el Pirineo a partir de hoy a partir de una cota de 1.800 metros. No obstante, para este puente las temperaturas se estabilizarán, según el Servei Meteorològic de Catalunya.

Por otra parte, ayer por la tarde granizó en la zona de Fraga y Mequinensa, sin causar una gran afectación en los cultivos.