La Generalitat asume el control de Boí Taüll después de renunciar Nozar a gestionarla

El grupo Nozar ha renunciado a la explotación de Boí Taüll 14 años después de hacerse con la mayor parte de las acciones de la estación y tras traspasar su titularidad a la Generalitat en 2014 por impago de un crédito. El Executiu asume de esta forma el control total de las instalaciones y trabajará través de las empresas públicas Actius de Muntanya y Avançsa, que mantendrán a toda la plantilla y sus directivos y abrirán tal y como estaba previsto el próximo sábado.

La consellera de Presidencia y portavoz, Elsa Artadi, informó ayer del acuerdo para asumir la gestión de Boí Taüll de forma urgente. Nozar entegó hace cuatro años la titularidad de la estación a cambio de cancelar su deuda con el Institut Català de Crèdit, de 7,3 millones de euros, pero siguió gestionando el complejo a través de un convenio que aseguró aquella temporada y comprometió al grupo Nozar a pagar un alquiler de 75.000 euros al año. El Executiu también ha encargado a sus dos empresas la elaboración en un plazo de tres meses de un informe en el que se analicen las alternativas de gestión del complejo. Artadi explicó que prevén inyectar 1,2 millones de euros y que las dos empresas se encargarán de ver qué necesidades tiene y cómo se puede licitar de cara al futuro: “Nuestra voluntad no es cerrar, sino hacer una licitación que funcione”.

La consellera Artadi anuncia una inyección de 1,2 millones de euros en el complejo de nieve

El director comercial de Nozar, Martí Rafel, explicó ayer en la presentación de la temporada que el convenio firmado hace cuatro años obligaba a Nozar a gestionar la estación hasta esta campaña, pero “a partir de aquí se abría la posibilidad de recomprarlo o rescindir el contrato”. “Al final hemos visto por distintas razones que lo mejor para garantizar la continuidad de la estación es rescindir el contrato con la Generalitat por nuestra parte y descartar la explotación y la opción de compra”. Añadió que en las más de tres semanas de negociación las posturas de Generalitat y empresa “no se han movido ni un centímetro”.

El Govern ya avisó en 2015 que velaría por el cumplimiento del contrato o asumiría el control del complejo. Rafel, que rechazó detallar el volumen de la deuda, sí explicó que esta hacía muy difícil cumplir con los objetivos marcados “por lo que se ha preferido dar este paso”. Los clientes no verán cambios ya que la actividad está garantizada así como los puestos de trabajo. Fuentes sindicales apuntaron que los empleados tienen asegurada su continuidad hasta abril del año que viene y ya están dados de alta en la Seguridad Social como trabajadores de Actius de Muntanya.

Asimismo, el alcalde de La Vall de Boí, Joan Perelada, remarcó que “la empresa no ha cumplido con su parte en la aportación que le corresponde y la Generalitat ha dicho basta”. Por ahora, “la decisión de la Generalitat nos da la tranquilidad que necesitamos porque durante las últimas semanas se han vivido momentos muy complicados y la apertura de Boí-Taüll es decisiva para el desarrollo económico del territorio”.

Por su parte, Artadi explicó que la estación genera 140 puestos de trabajo directos y otros 300 indirectos.