TURISMO PUENTE DE LA PURÍSIMA
El turismo desborda las pistas de esquí y alud de visitantes al patrimonio cultural y natural
Miles de esquiadores llenan las estaciones y rebosan los parkings de Boí Taüll y Port Ainé || Colas de más de hora y media en los taxis a Aigüestortes y cientos de visitas al románico de La Vall de Boí
La gran afluencia de turistas al Pirineo con motivo del puente de la Purísima desbordó ayer las pistas de esquí y se extendió al Parc Nacional d’Aigüestortes, las iglesias románicas declaradas Patrimonio Mundial de La Vall de Boí y otros elementos del patrimonio natural y cultural de las comarcas leridanas. Así, un alud de esquiadores superaba a mediodía la capacidad de los aparcamientos de Port Ainé y Boí Taüll (ver desglose), mientras que cientos de personas tomaron taxis para visitar el Parc Nacional. Una jornada de buen tiempo, con sol y temperaturas suaves, espoleó las salidas del creciente sector del turismo que visita Lleida durante la campaña de invierno sin calzarse unos esquís.
Unos cuatro mil esquiadores llenaron la estación de Boí Taüll, según responsables del complejo. Con el parking lleno, los coches podían verse estacionados a lo largo de un tramo de más de 300 metros de la carretera de acceso a las pistas de la Alta Ribagorça, una situación que también se dio en la entrada a Port Ainé (ver desglose inferior). Entre tanto, las iglesias románicas de La Vall de Boí recibían unos novecientos visitantes, según fuentes municipales. A lo largo de la jornada partieron de este municipio más de trescientos trayectos en taxis a Aigüestortes. En el sector de Espot, había que hacer cola durante más de una hora y media para poder subir a uno de los vehículos autorizados para acceder a este espacio protegido.
El tráfico de automóviles particulares era también especialmente intenso en el municipio de Sant Esteve de la Sarga por la llegada de visitantes al congosto de Mont-rebei, otro de los espacios naturales más visitados de las comarcas de Lleida en los últimos años. Por otra parte, en el Alt Urgell volvieron a registrarse retenciones para acceder al Principado de Andorra. Empezaron a primera hora de la mañana en la carretera N-145 en Les Valls de Valira, con colas que al mediodía llegaron a los diez kilómetros de longitud, hasta la rotonda de La Seu d’Urgell. La carretera CG1 en Sant Julià de Lòria registró también cerca de 4 kilómetros de retenciones en sentido norte, informa C. Sans.
Lleida
La estación de esquí de Port Ainé en Rialp recibió ayer a 2.610 esquiadores en una jornada en la que predominó el buen tiempo y un estado óptimo de la nieve en las cotas altas. El complejo invernal abrió 16,7 kilómetros esquiables y desde las once de la mañana se cerró el parking de la cota 2.000 y media hora después se cerró el de la cota 1.500 ante la afluencia de visitantes y los vehículos tenían que aparcar en la carretera de acceso a la estación y los esquiadores debían ir andando hasta el telesilla que les lleva a las pistas. Ayer la llegada de nuevos turistas fue notable al ser viernes, aunque la mayoría llegaron al Sobirà el miércoles y el jueves para pasar el puente, según explicaron. No obstante, responsables de la estación apuntaron que el día con más afluencia se espera para hoy dado que la previsión de la climatología es buena. El buen tiempo favoreció que muchas familias con niños aprovecharan las instalaciones para disfrutar de la nieve, haciendo excursiones con raquetas o practicando esquí en el parque lúdico.
Los esquiadores destacaron el buen estado de la nieve en las cotas altas de la estación donde se acumulaban hasta 50 centímetros de nieve polvo. Por su parte, en la estación de esquí de Espot se registraron más de un millar de esquiadores durante la jornada de ayer y para hoy se esperan otros mil.
El esquí nórdico confía en superar los visitantes de la pasada temporada Las estaciones de esquí nórdico esperan superar este invierno los 76.000 visitantes que recibieron la pasada temporada, entre diciembre y abril. El hecho de que Lles y Tuixent-La Vansa abrieran de forma excepcional a principios de noviembre gracias a las grandes nevadas contribuye a este optimismo. Esta última tiene ahora 25 kilómetros de pistas abiertas así como circuitos de raquetas y ha recibido a más de 5.000 personas en el último mes. Asimismo, Aransa ha abierto para usos turísticos, como ya han hecho las de Lles, Guils Fontanera, Sant Joan de l’Erm y Tavascan. La venta de forfaits de temporada se sitúa en 1.300 frente a 900 el año pasado.