RIEGOS INFRAESTRUCTURAS
Dieciséis balsas del Segarra-Garrigues siguen en desuso a los seis años de construirse
De un total de 38, habilitadas por la Generalitat, a la espera de que entren en servicio más hectáreas de riego || La de Les Borges Blanques funcionará el próximo año para abastecer al regadío de L’Albi
Un total de dieciséis embalses del canal Segarra-Garrigues están en desuso seis años después de construirse, a la espera que se amplíe la superficie regable. Esta cifra supone algo más del 40% del conjunto de balsas que hay en la red de riego, que depende de la Generaliat y que ha construido la adjudicataria Aigües Segarra-Garrigues, que cuenta con un total de 38. Precisamente, una de estas balsas entrará en funcionamiento de cara a la próxima campaña de riegos para dar servicio al regadío de L’Albi, inicialmente fuera del área del Segarra-Garrigues, que a través de la Generalitat accederá al agua del canal para garantizar sus cultivos. Las obras de conexión de la balsa, ubicada en Les Borges Blanques, con el riego de L’Albi, las lleva a cabo la propia Generalitat.
En una jornada técnica en la Escola Agrària de Tàrrega sobre balsas de riego y responsabilidades sobre éstas, Miquel Sacrest, director general de Aigües del Segarra-Garrigues (ASG), avanzó la próxima puesta en servicio de la balsa, ubicada en el sector 15, y señaló además que ya han recibido una carta de la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, autorizando los trámites para regar en el sector 13 (Aitona, Seròs, Llardecans y Sarroca), un extremo que permitirá poner en servicio cuatro balsas más ya construidas e inoperativas hasta ahora.
Precisamente, una de las dificultades con que se ha encontrado el Segarra-Garrigues es el ritmo lento de adhesión de los regantes, que ha llevado a que la Generalitat no autorice obras de la red secundaria del regadío hasta disponer de un quórum de al menos el 60% de los regantes que se apunten al proyecto. Esto conlleva que parte de la red principal que construyó la adjudicataria de la Generalitat esté acabada pero no se utilice, con el desgaste que implica.
Solo 350 de las 5.000 balsas que hay en Catalunya están registradas Solo 350 presas y balsas de las más de 5.000 infraestructuras de almacenamiento de agua que hay en Catalunya están registradas en la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) y tienen su plan de autoprotección en caso de que las dimensiones y el riesgo de la balsa lo requieran. Carles Barbero, responsable del departamento de Infraestructuras de Control y Regulación del ACA, avanzó ayer estos datos en la jornada celebrada en Tàrrega. Barbero también destacó que desde 2008 la normativa de presas especifica que las balsas también deben regularse y explicó que los propietarios con balsas que superen los 5 metros de altura o los 100.000 metros cúbicos de capacidad tendrían que llevar a cabo un estudio técnico para clasificarlas en grandes o pequeñas y por el riesgo que implican. La administración determinará entonces si estas balsas deben regularse y qué plan de autoprotección deben tener o si este es necesario.