La Generalitat abre la puerta a que Boí Taüll pase a manos de FGC la próxima temporada

La Generalitat abre la puerta a poner las pistas de Boí Taüll en manos de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) una vez concluya esta temporada de invierno. El secretario de Empresa y Competitividad, Joaquim Ferrer, confirmó ayer en El Pont de Suert que esta es una opción que la conselleria tiene sobre la mesa, aunque recalcó que la continuidad de la estación está garantizada sea cual sea el tipo de gestión que adopte en el futuro. Tras la renuncia del grupo Nozar a su contrato de arrendamiento el pasado mes de noviembre, la empresa pública Actius de Muntanya asumió la gestión directa de forma temporal a pocas semanas de la inauguración de la temporada.

“No nos preocupa hacer una gestión directa, traspasarla a Ferrocarrils o buscar otra concesionaria, estamos abiertos a todas las opciones”, afirmó Ferrer, quien recordó que deberán plantear un informe de alternativas a la Generalitat en un plazo de tres meses. El secretario hizo estas declaraciones tras reunirse con el presidente del consell comarcal y los alcaldes de la Alta Ribagorça, en un encuentro al que asistió también Antoni Sanmartí, director de estaciones de montaña de Ferrocarrils. Ferrer señaló que la empresa pública de la Generalitat, propietaria en Lleida de Port Ainé y Espot Esquí y de otros dominios esquiables en el Pirineo de Girona, está brindando asesoramiento sobre la gestión de Boí Taüll. “Aportan su apoyo y su experiencia durante este periodo de impasse”, señaló. El secretario de Economía se mostró convencido de que la estación de la Alta Ribagorça “puede ser rentable” tras verificar el buen inicio de esta temporada. Sin embargo, valoró que presenta “particularidades” que complican “aplicar en ella de forma mimética el mismo modelo de gestión que en el resto de pistas rescatadas por la Generalitat”, que han pasado de forma progresiva a manos de Ferrocarrils. En este sentido, destacó su papel como “motor económico” de la comarca.“Asumimos la gestión como una solución de urgencia”, recalcó el secretario, quien apuntó que “si Boí Taüll hubiera cerrado este invierno, quizá no hubiéramos podido reabrirla”.

“Debemos seguir presionando para obtener mejoras en carreteras” El secretario de Empresa afirmó que la Generalitat debe “seguir reclamando y presionando” para obtener mejoras en las carreteras N-230 y N-260, propiedad del Estado, y recalcó la importancia de las infraestructuras de comunicaciones a la hora de determinar dónde se implantan actividades y dónde acude el turismo. Estas declaraciones llegan cuando la última edición del estudio EuroRAP sitúa un tramo de la N-230 como el segundo entre los de mayor riesgo de España y califica como peligrosos 600 kilómetros de la red viaria leridana (ver SEGRE de ayer). El presidente del consell, Josep Lluís Farrero; la alcaldesa de Vilaller, Maria José Erta; el alcalde de El Pont, José Antonio Troguet, y de La Vall de Boí, Joan Perelada, coincidieron en la necesidad de una reforma “integral” de la N-230 y se mostraron contrarios a mejoras puntuales: “Solo aumentan el tráfico y sobrecargan los demás tramos”, apuntaron.