MUNICIPIOS ELECCIONES LOCALES
Un solo alcalde opta a la reelección tras gobernar 40 años
El de Granyanella, último de los que ostentan el cargo desde 1979 || Y se retira el primer edil durante 24 años de La Vall de Boí
Perelada, en una conferencia en el salón de turismo Fitur de Madrid.
Solo uno de los alcaldes elegidos las elecciones municipales de 1979, las primeras tras el restablecimiento de la democracia, sigue en el cargo cuarenta años después en las comarcas de Lleida. Se trata de Ramon Pintó, primer edil de Granyanella que, ya jubilado con setenta años, tiene previsto presentarse a la reelección para un mandato más en los comicios municipales de la próxima primavera.
Solo dos ediles de esta “quinta” de 1979 se presentaron a las elecciones de 2015 en Lleida. Fueron Pintó y Daniel Górriz, histórico alcalde de Prullans que falleció tras proclamar su candidatura, poco antes de las elecciones. El tercero de estos alcaldes “históricos” de Lleida, Andreu Alet, de Odèn, ya no optó a revalidar el cargo en las pasadas municipales y se retiró hace cuatro años al concluir su mandato.
Joan Perelada presidió también el consell comarcal de la Alta Ribagorça entre los años 1999 y 2011
Otro de los alcaldes con mayor duración en el cargo en Lleida es el de La Vall de Boí, Joan Perelada, quien anunció que no optará a la reelección después de 24 años al frente del ayuntamiento. Perelada explicó ayer que tiene intención de retirarse por completo de la política para concentrarse en su actividad profesional en el balneario de Caldes de Boí.
Perelada llegó a la alcaldía en el año 1995 y ha ocupado el cargo desde entonces bajo las siglas de diferentes formaciones (ver desglose). Tras un primer mandato al frente de una candidatura independiente con democristianos de Unió, se presentó a las dos siguientes elecciones al frente de listas de CiU. En 2007, durante el Govern tripartito en la Generalitat, se presentó como candidato de una lista de Progrés Municipal, vinculada al PSC. Desde 2011 ha encabezado candidaturas independientes. También fue presidente del consell comarcal de la Alta Ribagorça durante doce años, entre 1999 y 2011.
Declaraciones de la Unesco y fondos extraordinarios “No he cambiado de camisa, sino de paraguas”. Con esta frase resume Perelada los cambios de partido a lo largo de su trayectoria, en busca de condiciones ventajosas para su municipio. Durante sus mandatos, La Vall de Boí ha obtenido la declaración de patrimonio mundial de la Unesco para el conjunto románico y las fallas, así como la reserva Starlight, y ha accedido a ayudas extraordinarias como la Ribagorza Románica.
