TRÁFICO INFRACCIONES
Trànsit multa a una docena de conductores cada hora por exceso de velocidad en Ponent
En 2018, se triplican las sanciones a chóferes ebrios en las carreteras leridanas, hasta más de 3.200
La conselleria de Interior y el Servei Català de Trànsit pusieron en marcha el año pasado, en el mes de abril, un plan de contención para frenar el aumento de la mortalidad en las carreteras catalanas. Un plan que se centraba en conductas de riesgo, como el exceso de velocidad, el consumo de alcohol y el uso del móvil al volante, entre otros. En 2018, Trànsit multó a una docena de conductores cada hora en Ponent por exceder los límites de velocidad. Por esta infracción, la más común al volante, fueron sancionados un total de 107.125 chóferes en las carreteras leridanas. Una cifra que ha descendido un 17,8% respecto a 2017, un año récord, cuando se superaron los 130.400 conductores multados por exceso de velocidad.
Según los datos facilitados por Trànsit, el aumento de los controles policiales para interceptar a conductores temerarios también ha provocado el aumento de las sanciones por consumo de bebidas alcohólicas al volante. Entre enero y diciembre de 2018, se iniciaron un total de 3.258 expedientes sancionadores a chóferes que dieron una tasa positiva en los controles de alcoholemia en las carreteras catalanas. Esto supone que se han triplicado las multas por consumo de alcohol en solo un año en las comarcas de Ponent, con una media de casi nueve conductores sancionados por ir ebrios al día.
En 2018, Catalunya registró un aumento del 7% de las víctimas mortales en accidentes de tráfico. Para frenar este aumento de la siniestralidad y perseguir a los “conductores homicidas”, Interior y Trànsit presentaron el pasado jueves una serie de medidas que incluyen más controles policiales, nuevos radares de tramo e incentivar las campañas de concienciación contra el uso del móvil y el uso de los sistemas de seguridad pasiva, como son el uso del cinturón, el casco y de retención infantil.
Está previsto que este año, los Mossos d’Esquadra de la división de Tráfico recuperen los llamados vehículos “mirilla”, coches camuflados y dotados con cámaras de vídeo para interceptar infractores al volante. También se pondrán en marcha nuevos radares de tramo, cuatro en las próximas semanas y seis después del verano, y se potenciarán los radares móviles. Asimismo, se pondrá en marcha el helicóptero de Trànsit para tareas de vigilancia y control.
Según el balance presentado por el departamento, la principal causa de accidentes continúa siento la distracción, presente en uno de cada cuatro siniestros registrados en 2018. Además, un 77% de los expedientes sancionadores del año pasado fueron por exceso de velocidad.