El Govern 'resucita' el canon del agua para las granjas

La Federación de Cooperativas Agrarias de Catalunya denunció ayer que la Generalitat ha recuperado el proyecto de cobrar el canon del agua a las granjas de animales, del que ahora están exentas. El sector asegura que se trata en realidad de la creación de un impuesto con exclusivo afán recaudatorio y que costará 2.800 euros al año a cada granja, que se sumarán a los costes de explotación.

El nuevo canon del agua a las granjas figura, según reveló ayer Ramon Armengol, responsable de ganadería de la FCAC, en el proyecto de medidas de acompañamiento de los presupuestos de la Generalitat, que ayer analizó el Consell de Treball Econòmic i Social de Catalunya (Ctesc), al que acudieron representantes de la federación y mostraron su oposición. La implantación del canon se haría de forma gradual y estaría plenamente en vigor en 2022, para cuando la Generalitat prevé alcanzar una recaudación de 2.450.000 euros. Esta medida es compatible con la congelación del propio canon del agua, aprobada en consejo de administración de la Agència Catalana de l’Aigua, ya que en el caso de las granjas se trataría de levantar una exención. La medida afecta a una parte de las granjas, concretamente a las de porcino y avícolas. Para la Federación de Cooperativas, se trata de una medida “arbitraria e injusta”, ya que se aplicaría por un servicio de saneamiento que no se utiliza. El sector asegura que “las pocas aguas sucias generadas en las explotaciones ganaderas se gestionan junto con las deyecciones, que son tratadas o aplicadas en terreno agrícola y en ningún caso vertidas en el lecho público”, que depende de la Agència Catalana de l’Aigua.