El Segrià se opone al vertedero de Riba-roja y pide a la Generalitat que paralice el proyecto

Alcaldes del Segrià y el consell comarcal se oponen al vertedero industrial previsto en el término municipal de Riba-roja, junto al límite con Lleida y a poco más de tres kilómetros del pueblo de Almatret y a menos de siete de Maials. Además, piden a la Generalitat y a la Agència Catalana de Residus (ARC) la paralización de los trámites e instan a las empresas promotoras (la UTE de Urbaser y Griñó) que retiren “inmediatamente” su iniciativa. El presidente del con-sell de alcaldes y primer edil de Maials, David Masot, explicó que el proyecto del vertedero “choca frontalmente” con el plan estratégico del Segrià que se basa en el patrimonio cultural y natural del territorio, así como en el fomento del turismo y de la producción agrícola, según consta en el manifiesto que se hizo público durante el consell de alcaldes que se celebró ayer y que se trasladará a los ayuntamientos y al pleno del Segrià para que se debata en forma de moción. Asimismo, el grupo del PDeCAT en la Diputación (en el equipo de gobierno) ha presentado una moción de apoyo al manifiesto que se debatirá en el pleno de este mismo mes. En este sentido, la presidenta de la Diputación, Rosa Maria Perelló, se reunió con los alcaldes y se mostró confiada en que todos los grupos políticos de la corporación apoyarán la moción y apuntó que es necesario “preservar la riqueza natural del territorio” e instó a hacer frente común y consensuado.

Por su parte, la presidenta del consell, Maria José Invernón, apuntó que harán “todo lo posible para que este vertedero no se construya al lado de nuestra comarca”. Asimismo, el comunicado recuerda que el Segrià tiene un “compromiso con la gestión responsable de los residuos” y que por este motivo se han implantado nuevos modelos de recogida de basuras como el puerta a puerta en 22 municipios, que ha ayudado a que el reciclaje se dispare en estas localidades (ver desglose). Además, alcaldes, consellers comarcals y concejales dudan de que “la ubicación propuesta para el vertedero reúna los requisitos más aconsejables, porque añadirá más presión al sistema hidrológico a través del drenaje de lixiviados y otros químicos potencialmente tóxicos”. Los firmantes del comunicado también se comprometen a “no promover ni dar cabida a ningún proyecto similar” en su territorio, porque apuntan que la construcción del depósito “supone un grave perjuicio para la comarca”.