Otros 8 millones para cerrar el litigio de la UE contra el Segarra-Garrigues

La Generalitat invirtió el pasado 2018 hasta 4,6 millones de euros en medidas ambientales para paliar el impacto de la construcción del canal Segarra-Garrigues sobre las poblaciones de aves protegidas, según los datos de la conselleria de Agricultura. Este 2019 prevé asignar a este capítulo otros 6 millones de euros y el año que viene 2,5 millones más en concepto de mantenimiento de estas medidas. En paralelo, el departamento que dirige Teresa Jordà ultima actualmente el último de los informes sobre las actuacione desarrolladas en torno a la fauna afectada por el proyecto de regadío y lo enviará en los próximos días a la dirección general de Medio Ambiente de la Comisión Europea como paso final para cerrar de forma definitiva el largo litigio que enfrenta a la UE con Catalunya a través del Gobierno español a causa del proyecto hidráulico. Será el informe definitivo de la conselleria para explicar las últimas medidas que se han adoptado para dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal de la UE, dictada en 2007 y por la que se condenó al estado español y a la Generalitat por haber perjudicado a poblaciones de aves protegidas en un inventario europeo con el proyecto del canal leridano. Ambas administraciones se han enfrentado durante más de diez años a multas millonarias si no se daba cumplimiento a la sentencia y se corregía la situación.

Con este objetivo, la Generalitat aprobó en 2010 una nueva declaración de impacto ambiental (DIA) del proyecto en la que se establecían medidas y recortes en las zonas de regadío para dar cumplimiento al fallo del alto tribunal. Entre ellas, la exclusión del riego total de parte de la zona regable inicial o la compra y alquiler de 3.500 hectáreas para usarlas como campos de prueba para impulsar medidas de defensa de estas aves. En este sentido, una de las propuestas que ha quedado descartada ha sido, precisamente, una prueba piloto en Els Plans de Sió donde la práctica desaparición del sisón impide llevar a cabo experimentos con regadío y, por ello, transformar la zona.

Más de 60 millones que se suman a las obras Los últimos cálculos de la Generalitat cifran en 61 millones de euros lo que costarán las medidas dirigidas estrictamente a paliar los daños del proyecto de riego sobre la fauna de secano protegida por la UE. Hasta el pasado 2018 se habían invertido 26 millones del total. Esta cifra se suma a la de las obras, que se eleva a 1.183 millones de euros, por lo que el conjunto de inversión de la Generalitat en el canal será finalmente de 1.245 millones de euros. De estos ha ejecutado un 60%, y supone un desvío de 250 millones sobre la previsión inicial.