La minería vira hacia la industria y el turismo revive minas cerradas en Lleida

La Generalitat tiene sobre la mesa tres peticiones para buscar en Lleida minerales para usos industriales como oro, tungsteno y cobalto, lo que supone un giro respecto a las más de cien explotaciones mineras que abastecen al sector de la construcción. De forma paralela, surgen proyectos para recuperar antiguas minas cerradas como atractivo turístico.

La minería toma un nuevo rumbo en Lleida, una vez cerradas las últimas minas de carbón y tras años en que la extracción de minerales ha estado al servicio de la construcción. La gran mayoría de las 119 explotaciones abiertas se dedican a extraer grava, arena, piedra caliza y arenisca, así como arcillas y yeso. Esto contrasta con al menos tres proyectos para investigar la presencia en el subsuelo leridano de minerales para usos industriales: oro para joyería y microchips; tungsteno y cobalto para componentes electrónicos. También buscan otros materiales usados en aleaciones metálicas o para pigmentos, como monacita, casiterita, ilmenita, circón y rutilo.

Planes para nuevas explotaciones mineras empiezan a abrirse camino, en ocasiones con oposición de los territorios afectados, mientras que antiguas minas y su entorno son objeto de proyectos para convertirlas en atractivos turísticos. Las galerías bajo tierra son cosa del pasado en Lleida, donde toda la extracción de minerales se hace al aire libre. Solo quedan cinco minas subterráneas en toda Catalunya y están en las comarcas de Barcelona. Los proyectos que la Generalitat tiene ahora sobre la mesa solo piden por ahora indagar la presencia de minerales. Proponen hacerlo mediante sistemas no invasivos, basados en el análisis de campos electromagnéticos; y también mediante perforaciones de hasta 150 metros de profundidad.

Peticiones para buscar minerales en Lleida se han rechazado o han caducado antes de obtener permisos

Algunas propuestas para buscar minerales en Lleida afectan a espacios naturales y chocan con oposición

Consell y estudiosos de las minas de Malpàs impulsan una ruta a pie con señales para darlas a conocer

Esto último es precisamente lo que plantea Neometal Spania en el municipio de Alt Àneu, uno de los proyectos mineros más discutidos al afectar 27,5 kilómetros cuadrados en el Parc Natural de l’Alt Pirineu. También ha chocado con oposición la propuesta de Cobalt Rock SL, que quiere extraer cobalto en Baix Pallars, cerca del pantano de Montcortés. El temor a contaminación de las aguas. al deterioro del paisaje y a un aumento del tráfico de vehículos pesados son algunos de los motivos de la oposición a proyectos mineros, especialmente cuando afectan a espacios protegidos.

Neometal Spania tiene rasgos en común con Cobalt Rock SL. En ambos casos se trata de empresas con apenas dos o tres años de antigüedad, con domicilio social en una vivienda particular o el despacho de una gestoría, y cuyo capital se limita a los 3.000 euros que constituyen el mínimo legal para crear una sociedad limitada. El único vínculo evidente con la actividad minera es la profesión de alguno de sus socios, dedicado a la geología o a la ingeniería de minas. Un perfil similar es el de Ambar Technologies, que ha solicitado permiso para buscar oro y otros minerales en municipios de la Noguera. Esta última, en cambio, no ha recibido hasta ahora oposición alguna.

Esto suele despertar desconfianza entre quienes se oponen a sus proyectos. Algunos sospechan que son sociedades pantalla, que permiten a grandes grupos del sector buscar recursos minerales con discreción. Otros, en cambio, temen que se trate de maniobras especulativas, con el fin de vender a terceros los permisos de investigación una vez obtenidos. Unos y otros citan como ejemplo la absorción de Neometal Spania por parte de Apollo Minerals Limited. Este grupo australiano adquirió también otra firma al otro lado de la frontera tras recabar las primeras evidencias de la existencia de tungsteno en la zona donde se encuentra el puerto de Salau.

La Generalitat, por su parte, ha concedido recientemente siete permisos de investigación minera en Lleida y tiene seis más sobre la mesa. Esta autorización otorga a su titular un periodo de exclusividad a la hora de buscar recursos mineros dentro del ámbito territorial del permiso. Sin embargo, no todas las solicitudes prosperan. Así, el departamento de Empresa ha declarado la caducidad de una petición para buscar cobalto en La Torre de Capdella, debido a que el promotor no presentaba la documentación requerida. Lo mismo sucedió hace cinco años con una tentativa de buscar uranio en La Molsosa; mientras que todas las propuestas para prospecciones de petroleo y gas en Lleida en los ultimos años han decaído o han sido rechazadas.