MUNICIPIOS PATRIMONIO
Hacienda atribuye a los vecinos de Bassella el IBI de 23 equipamientos
Desde un cementerio hasta captaciones de agua potable e incluso una iglesia || Al estar en suelo cedido por particulares que ahora el ayuntamiento debe expropiar
Hacienda atribuye a vecinos de Bassella el impuesto de bienes inmuebles (IBI) de 23 equipamientos públicos del municipio, que van desde captaciones de agua potable y salas de actos hasta un cementerio e incluso una iglesia. El proceso de regularización catastral que el ministerio lleva a cabo en toda España tuvo un efecto inesperado en esta localidad del Alt Urgell. Puso de manifiesto que estas edificaciones se construyeron sobre suelo cedido por particulares de forma altruista, y sin que el ayuntamiento lo inscribiera nunca como suyo. El consistorio ha dado ahora los primeros pasos para hacerlo.
El ayuntamiento ha iniciado expedientes de expropiación para adquirir los terrenos donde se alzan estos equipamientos públicos e inscribirlos como suyos en el registro de la propiedad. Con ello esperan evitar que se consumen situaciones aparentemente absurdas, como tener que pasar a los vecinos recibos del IBI por un cementerio municipal; o que otro tenga que pagarlo por la iglesia, precisamente en un país donde parroquias y obispados están exentos de hacerlo.
La alcaldesa, Cristina Barbens, corroboró que el nuevo catastro “pretendía cobrar impuestos sobre edificaciones municipales” a los vecinos. Para evitarlo, los afectados presentaron alegaciones, avaladas por documentos del ayuntamiento que declaraban que los bienes eran instalaciones municipales. Finalmente, han recurrido a expropiaciones para regularizar la situación y evitar “las situaciones anómalas que han aflorado”, según explicó la alcaldesa. Este proceso se inició hace un año. Hacienda ha atribuido a vecinos el IBI del cementerio del núcleo de Aguilar, por lo que el consistorio ha tenido que expropiado 1.214 metros cuadrados de suelo no urbanizable e indemnizado al propietario con 352 euros. Más inusual aún es el caso de la iglesia de este mismo núcleo, que el ayuntamiento construyó después que la anterior quedara bajo las aguas del pantano de Rialb. En este caso ha expropiado casi mil metros cuadrados por 1.705 euros. A ello se suman pozos y depósitos de hace unos 50 años, cuando la administración hizo llegar el agua a núcleos como Serinyana, Aguilar, Altès, Ogern o la Clua.